El Palacio de Congresos de Cáceres acogerá el próximo 6 de junio, a las 11.30 horas, un simulacro de atención a múltiples víctimas en el que se verán involucradas 500 personas. El planteamiento es el de un incendio que se iniciará en los camerinos hasta extenderse por el patio de butacas provocando el pánico entre los asistentes. Así, se pondrá a prueba la seguridad del edificio para evitar posibles situaciones de avalancha como la ocurrida el pasado mes de noviembre en el Madrid Arena.

Esta actividad servirá a su vez de colofón al Curso de Experto Universitario en Urgencias y Emergencias, impartido desde enero a junio de 2013 por el Colegio de Enfermería de Cáceres. Su presidente, Isidro Nevado, explicó ayer la necesidad de buscar un simulacro no tan habitual, sino "algo más atractivo" que permita "corregir aquellos posibles errores y sincronizar a todas las instituciones intervinientes".

Por su parte, José María Calvo y Mercedes Huidobro, médico y enfermera, ambos formadores del colegio desde hace años, serán los encargados de coordinar todo el simulacro. "Se les brinda a los estudiantes una oportunidad de hacer frente a una situación extraordinaria", afirmó Huidobro, quien aseguró que los alumnos tendrán que "organizar la escena y aprender a trabajar con el resto de profesionales bajo una situación de estrés". Este hecho, en concreto, se potenciará porque "no van a saber nada de lo que se van a encontrar hasta que se bajen de las primeras ambulancias".

PARTICIPANTES En este sentido, Calvo aseguró que se trata de un ejercicio "muy complejo por el número de intervinientes y de profesionales". Además, con esta actividad se quiere poner en práctica el plan de autoprotección del auditorio debido a su reciente remodelación. "Queremos ver de qué manera está preparado para trabajar con las salidas de emergencia", explicó Calvo.

En el desarrollo del simulacro van a intervenir, según estimaciones de los responsables, ocho ambulancias de Cruz Roja, dos dotaciones de bomberos, una unidad de intervención rápida y apoyo del helicóptero del SES, protección civil para evacuar a los heridos menos graves, así como la Policía Nacional y Local.

Los 25 enfermeros que participan en este curso harán frente a personas con quemaduras graves y politraumatismos de diversa consideración. Según indicó Nevado, finalizado el ejercicio se podrán "corregir posibles errores y mejorar en la preparación".