Cruzada de la calle Pizarro para impulsar el turismo en el centro de Cáceres

El ambiente en la calle Pizarro, una de las vías más características de la movida cacereña, comienza a resurgir poco a poco. La unión, hace aproximadamente un año, de todos los comercios de la calle en el colectivo Pizarro-Zona Monumental ha hecho posible la realización de novedosas actividades como "campañas de verano para el turismo o iniciativas navideñas como la fiesta del cava que celebramos el día de noche buena", indicó ayer Agustín 'Yiyo' Nieto, propietario de Bulevar, Espacio BelleArtes y Foodie, quien quiere grabar en el cliente la idea de que "Pizarro es una zona en la que puedes llegar a las 16.00 horas e irte a las 3.00 de la mañana".

En este sentido, el objetivo del colectivo es llevar a cabo en el futuro no solo promociones de ocio, sino también culturales y turísticas tales como presentaciones de libros o exposiciones de pintura. "Los próximos proyectos que tenemos en mente son la creación de un mercado de flores y otro de segunda mano, siempre con la idea de mantener el barrio más activo desde primera hora del día, no solamente durante la tarde-noche", agregó Nieto.

El colectivo, que se reune al menos una vez al mes y aglutina a todos los negocios de la calle, no solo a los de hostelería --ya que hay tiendas de artesanía, multitiendas, hoteles, librerías o galerías de arte--, mantuvo una reunión ayer en el Pequeño Gin en la que los propietarios perfilaron algunas de las próximas actividades a llevar a cabo. "Tenemos un proyecto en común que va a ser innovador para este Halloween", apuntó Nieto, quien no quiso desvelar nada más, aunque sí que confirmó que volverán a repetir la promoción de cava para esta Navidad.

Por su parte, las dueñas del Capitán Haddock, Sara Polo y Marisa Isidro, destacaron la variedad que ofrece la calle Pizarro con respecto a otras zonas de ocio, "donde puedes venir a bailar o a tomarte una copa tranquilo", mientras que el propietario de Habana, Juan Francisco Pache, agradeció la creación del colectivo, que ha significado "un punto de inflexión" para el resurgir de la calle. "Todas las semanas nos vemos para hacer un diagnóstico de cómo se encuentra el barrio y lo que necesitaría", reveló.