Otra de las peticiones históricas de Aldea Moret es conseguir una mayor presencia policial, sobre todo por las noches. Los altercados se han incrementado con la apertura de un salón de apuestas en el barrio. Son muchos los vecinos que denuncian peleas, que se intensifican las noches de los fines de semana. «Es raro el día que no hay que llamar a la policía por problemas de este tipo», afirma el presidente de la asociación sociocultural de Aldea Moret, Arístides García.

Su colectivo ya lanzó una campaña para denunciar la apertura de este tipo de establecimientos en la ciudad y lleva a cabo charlas con jóvenes para informar sobre los problemas que puede conllevar el juego. «A la de Aldea Moret viene mucha gente de Cáceres porque está en un sitio más alejado y aislado con lo que se aseguran que nadie les va a ver», asegura García. Lamentaron su apertura precisamente porque se hacía en una de las barriadas más obreras y con un mayor número de habitantes desempleados. «El día que tomó posesión el alcalde ya se le mandó una carta con estas denuncias, sabemos que a nivel local lo único que pueden hacer es controlar el acceso pero lo que necesitamos que se ponga coto a este tipo de negocios», insiste el presidente.

Conocedor de esta situación el alcalde, Luis Salaya, ya trasladó este problema a la Policía Nacional hace un mes, a la que solicitó colaboración con una presencia más intensa para conseguir frenar la conflictividad. Tal y como indicó entonces Luis Salaya e informó este diario han sido varios los vecinos que se han dirigido al ayuntamiento para reclamar más presencia policial. La Policía Local ya ha intensificado su vigilancia y pretende reforzarla con la apertura en el barrio de una sede de la municipal (en la pasada legislatura se cerró la unidad de atestados que había en la barriada se llevó a las dependencias de la jefatura). Hasta ahora no se ha podido abrir porque estaba pendiente de la aprobación de los nuevos presupuestos, a los que se dio luz verde el pasado viernes.