Cáceres ha registrado 36 atropellos en lo que va de año dentro de su casco urbano. Estos son los datos que acumula la Junta de Extremadura en relación a los avisos que ha atendido el 112 sobre este tipo de siniestros en carretera hasta noviembre de 2021. Desglosado por meses, el gobierno regional contabiliza el grueso de accidentes en febrero (8) y marzo (5) seguidos de abril (4) y noviembre (4). Enero, agosto y octubre contabilizan 3 cada uno. Julio (1) y septiembre (2) se sitúan como los meses con menos siniestralidad. El único mes en el que no se contabilizan es mayo. El último atropello se produjo hace un mes cuando un peatón de 82 años fue arrollado por un coche en la calle Gil Cordero y resultó herido grave. En esa misma semana, precisamente, otro hombre de 80 años sufrió heridas graves tras ser atropellado en la calle Rhin.  

En cuanto a la gravedad, fue en abril cuando uno de los accidentes provocó la muerte de la persona atropellada. Ocurrió en la avenida del Ferrocarril, en una zona de la N-630 que da acceso a la capital cacereña próxima al Leroy Merlín, cuando un hombre de 89 años cruzó por la carretera en la que no hay zona para el tránsito de peatones y fue arrollado por un conductor, que más tarde dio positivo en el control de alcoholemia y drogas y además llevaba más de una década sin renovar la ITV. El anciano falleció a causa del impacto a pesar de los intentos de los servicios sanitarios por reanimarle. El conductor fue imputado de un delito de homicidio imprudente con el agravante además de conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas. Precisamente fue a raíz de este atropello mortal, el ayuntamiento valoró varias opciones con el Ministerio de Movilidad, titular de la carretera, y decidió ubicar un paso de peatones en la avenida a la altura de la glorieta que aunque cuenta ya desde hace semanas con la instalación de semáforos y la infraestructura de acceso, aún no ha sido inaugurado. 

¿Cuáles son los puntos ‘negros’ de la capital? 

Cada ciudad acumula sus puntos ‘negros’ de accidentes. Suelen coincidir con rectas que no entrañan dificultad en las que los conductores tienden a distraerse o calles en los que según incida la luz del sol en una época del año la visibilidad se reduce hasta el punto de nublar al conductor. En el caso de Cáceres, si existe una avenida que acumule siniestros relacionados con atropellos, sin duda, esa es la avenida de la Hispanidad, desde su inicio en la glorieta de Renfe hasta su final, en San Francisco, y coincidiendo ya con una de las entradas a la recién inaugurada ronda Sureste. 

En los últimos años, la avenida se ha convertido en una zona conflictiva tanto para conductores como para peatones. Según las estadísticas que maneja la Policía Local, uno de cada cinco atropellos que se producen en la ciudad, tienen lugar en algún intervalo de la vía. De hecho, ha albergado los sucesos más graves relacionados con los accidentes de tráfico en los últimos años. En julio de 2014 una mujer de 53 años, profesora del Paideuterion, fue arrollada por un coche mientras cruzaba un paso de peatones y tuvo que ser ingresada en coma. Dos años más tarde, en noviembre de 2016, un joven arrolló a una joven de 25 años, que falleció en el acto. Fue condenado a menos de dos años de cárcel. Además de los fallecidos, la vía acumula una larga lista de sucesos y heridos de gravedad. De hecho, en los últimos años se han colocado radares y se ha reducido la velocidad a 30 kilómetros en todo el tramo. 

Otras de las vías que más accidentes acumula es la avenida Virgen de Guadalupe y la calle Gil Cordero, debido a que la circulación transcurre en sentido directo a la posición del sol y deslumbra. En 2014 un coche se subió a la acera y resultaron heridas nueve personas. Ya en relación a las carreteras que recorren la ciudad, la DGT incluye año tras año en su lista ‘negra’ la N-630, entre las diez vías más peligrosas del país. 

En relación a este tipo de siniestros con resultado de muerte, también este año se resolvió en los tribunales el caso del atropello por el que falleció el médico José Luis Sánchez Blanco en el barrio de Vistahermosa. Este accidente se produjo en 2020 y el conductor fue condenado a dos años y seis meses de cárcel después de que se alcanzara un acuerdo entre las partes, una condena superior a dos años por la que el acusado tuvo que entrar en prisión. Fue condenado por varios delitos, conducción temeraria con el agravante de positivo en alcoholemia, homicidio imprudente y lesiones. 

En relación a la posible comparativa sobre las cifras de atropellos en la ciudad que pueda establecerse con respecto al año anterior, se da la circunstancia de que en 2020 las cifras de accidentes de tráfico se vieron reducidas de forma considerable debido a los meses en los que se prolongó el confinamiento y las restricciones de movilidad de los meses sucesivos. 

En el balance anual que elabora la DGT a nivel provincial a propósito del Día Mundial de las Víctimas de accidentes de tráfico el 23 de noviembre, expone que en este último año precisamente se ha producido un repunte de atropellos a peatones y ciclistas. 

En la provincia el número de víctimas mortales en accidentes de tráfico suma 10 personas, la misma que en 2020, aunque los accidentes han aumentado hasta 420, frente a los 333 del año pasado. En cuanto a los accidentes que implican peatones, recoge que se han producido hasta noviembre 56 siniestros, frente a los 35 de 2020, con el resultado de dos fallecidos mientras que en 2020 solo hubo un fallecido. En relación a la gravedad en siniestros con peatones, 14 resultaron heridos graves mientras que en 2020 fueron 6 las víctimas graves. Heridos leves suman 33 este año y 27 en 2020.

Por su parte, la Delegación de Gobierno en Extremadura sí ofrece datos a nivel local sobre los siniestros relacionados con atropellos en Cáceres de 2021 pero solo hasta mayo y contabiliza, sin precisar las circunstancias, que en la capital se produjeron 59 accidentes con víctimas, un fallecido, 10 heridos graves y 62 leves.

Sobre estos datos precisa que los atropellos son la segunda causa de accidentes de tráfico después de los choques frontolaterales entre vehículos. Los golpes por alcance y caídas de vehículos de dos ruedas completan las circunstancias más frecuentes de accidente. En relación a las infracciones más comunes al volante, en el caso de los conductores la más frecuente es que no respete las regulaciones de tráfico y por parte de los peatones, no cruzar por los pasos establecidos para ello. No obstante, la Dirección General de Tráfico (DGT) precisa que 80% de los atropellos se producen en el entorno de pasos de peatones.

Desde una sanción económica hasta seis años de cárcel 

En relación a la responsabilidad penal en la que incurre un conductor que incumple las normas de tráfico y provoca un accidente o atropella a una persona, el Código Penal regula en dos artículos las condenas que contempla, que pueden oscilar desde una multa económica, la retirada de carné o la pena de prisión de hasta seis años.

En primer lugar, el artículo 379 recoge que «el que condujere un vehículo superior en sesenta kilómetros por hora en vía urbana o en ochenta kilómetros por hora en vía interurbana a la permitida reglamentariamente, será castigado con la pena de prisión de tres a seis meses o con la de multa de seis a doce meses». De la misma manera, estima que será condenado con las mismas penas la persona que conduzca « bajo la influencia de drogas, estupefacientes, sustancias psicotrópicas o alcohol».

En segundo lugar, el artículo 142 hace mención al delito de homicidio imprudente, el que se aplica habitualmente en el caso de atropello, y contempla una pena de prisión de uno a cuatro años de prisión. Con la actualización de la ley de tráfico, si causa la muerte a varias personas la pena podrá aumentar a seis años y si el número es muy elevado, incluso a nueve años.