Fue una de las últimas decisiones que adoptó la corporación local antes del confinamiento por el coronavirus. Dos años después el concurso que se convocó en febrero de 2020 y que se resolvió en los primeros días de marzo de ese año se podrá llevar a la práctica. Fue un vuelvo en el sistema de asignación de los espacios de las casetas de animación del recinto ferial para las fiestas de San Fernando, aunque no dio todos los resultados esperados, casi la mitad de los espacios de las casetas de animación están todavía sin ocupar.
El concurso solamente sirvió para la adjudicación de 8 de los 24 espacios. Se resolvió la concesión de los de mayor tamaño en la calle central y otros dos menores, uno de ellos el de La Bola de Cristal junto a la caseta municipal. Este año se ha solicitado de manera directa la ocupación de otros cinco espacios del recinto ferial, aunque a fecha del pasado miércoles todavía se estaba pendiente en el ayuntamiento del pago de tasas y fianzas y de la presentación de la documentación para poder dictar la resolución de adjudicación definitiva. Todavía quedan libre once de los espacios para las casetas.
El concurso de febrero de 2020 fue el primero en el que el ayuntamiento abría un procedimiento de libre concurrencia para la adjudicación de las casetas de animación del recinto ferial. Hasta la edición de 2019 de la feria de San Fernando se siguió respetando un sistema de distribución de los espacios que reconocía una titularidad tradicional sobre la licencia de ocupación. Esto hacía que los mismos empresarios o colectivos ocuparan año tras año los mismos espacios. Se intentó modificar en la primavera de 2017, pero el cambio no prosperó.
El nuevo modelo permitirá que la recaudación del ayuntamiento sea algo mayor que con el anterior procedimiento, se ganan 2.000 euros que es el exceso que sobre el importe base de la tasa o cuota de ocupación del espacio público se ofreció en las ocho ofertas que se presentaron al concurso hace dos años y que se admitieron. Pero no se produjo la concurrencia competitiva que se podía esperar de este procedimiento. Hubo 8 solicitudes y solamente uno de los licitadores concurrió a dos parcelas del recinto de animación, mientras que solo uno de los espacios para casetas recibió dos ofertas, la número quince, una de las de mayor tamaño que están en la calle principal del recinto ferial.
La adjudicación del concurso fue para dos ediciones de la feria. En principio para los años 2020 y 2021, que se ha pasado a los de 2022 y 2023. En cada edición de la feria hay menos casetas de animación en el recinto ferial. El concurso, pese a arbitrar un sistema más justo y más ventajoso para las arcas locales, no ha permitido una mayor ocupación. En 2019 solo hubo quince casetas, este año, de momento, solo habrá doce. Son cifras que están muy lejos de la treintena de diez años antes y de las más de medio centenar de hace dos décadas.
Cuando en la primavera de 2017 se intentó cambiar el modelo de adjudicación, al ser una de las condiciones que Ciudadanos puso al PP para la aprobación de los presupuestos, colectivos culturales y recreativos de la ciudad que consideraron que un nuevo sistema de adjudicación les echaría de la feria, protestaron y anunciaron su disposición a presentar alegaciones al nuevo concurso que se convocase. La junta local de gobierno del ayuntamiento, entonces con el PP al frente, decidió aparcar el cambio y mantener la titularidad tradicional sobre la licencia de las casetas. Ciudadanos se había posicionado en contra de este modelo al considerar que se podía estar dando «un posible fraude en la gestión de las casetas».
El precio base de la licitación del concurso de 2020 fue el de la tasa de instalación de las casetas y de la ocupación del dominio público. Había tres modelos, según el tamaño, con un precio mínimo que estaba entre los 1.797 euros de las más pequeñas (200 metros cuadrados) y los 4.896 de las mayores (600 metros cuadrados). La adjudicación se decidió por el exceso que se ofreció con respecto al precio base.
Por otra parte, desde el ayuntamiento se confirmó que habrá una preferia que se celebrará a partir del 19 de mayo, unos días antes del inicio del programa de ferias y fiestas que se celebrará durante la última semana del mes de mayo. El año pasado hubo feria en septiembre, pero sin casetas de animación.
La empresa Carrero Velasco organizará el concurso de saltos en el hípico
La Mesa de Contratación del ayuntamiento propuso en su sesión del pasado lunes adjudicar a la empresa Carrero Velasco la organización del concurso nacional de saltos de Cáceres, en el recinto hípico, que es una de las actividades del programa de actos de la feria. La adjudicación se ha hecho por un importe de 47.921 euros, por debajo del precio de licitación que calculó el ayuntamiento cuando sacó a contratación este concurso.
Entre los servicios que tiene que prestar el adjudicatario está contratar o llegar a un acuerdo de colaboración con una empresa que esté autorizada para la organización de apuestas deportivas ajustándose a las condiciones del reglamento autonómico. Con esta posibilidad que aparece en el pliego del concurso se retoma que se pueda volver a apostar en las actividades del hípico después de que en el año 2018 agentes de la Policía Nacional irrumpiesen en el recinto e impidiesen la realización de apuestas en el concurso de saltos. En la memoria económica del concurso se calculaban unos gastos que ascendían a 71.971 euros frente a unos ingresos de 24.050. Con su oferta, el adjudicatario ha reducido el cálculo de los costes de organización.
