«Ensalada César con pollo de corral y picatostes, sopita de mariscos, diferentes arroces, huevos rotos con jamón, churrasco de ternera, pluma y secreto ibérico, merluza, bacalao, calamares…», detalla Bernardo Sánchez la carta haciendo gala de toda su profesionalidad y donde lleva al comensal a complacerse con su cocina que se basa, sobre todo, en el producto de calidad y su temporada. «¿Qué escogería usted?, interrumpe El Periódico Extremadura. «No puedo ayudarles, todo lo que ofrezco está igual de fresco: dejen que escoja su gusto», responde con rapidez y seguridad. Y nos decidimos por los huevos rotos. De inmediato el camarero trae un abundante plato con huevos de corral sobre patatas fritas recién hechas y jamón ibérico.
En el restaurante El Descanso, situado en Almoharín, se puede comer cada día comida casera con un pequeño toque de vanguardia, como si uno estuviese en su propio hogar, a un precio muy asequible. El responsable de que esto sea así es Manuel Sánchez, que lleva con este establecimiento unos diez años. «Intentamos que el cliente tenga la sensación de estar comiendo como en casa», explica Bernardo Sánchez. Y lo consiguen también por sus desayunos y los ricos aperitivos que ofrecen a su clientela.
De postre tienen tarta de queso, brownie, mousse de chocolate, copita de helados, un café exquisito... El local ofrece oficio y sazón sin bobadas para hacer feliz a la gente. Son buenos conocedores del mar y la montaña, valientes, innovadores y con una terraza, a pie de carretera con vistas a la dehesa.
