La vivienda que sufrió un derrumbe parcial afectando a su tejado el lunes por la mañana en Coria y que está ubicada entre las calles Cruz de Piedra y Muralla estaba a la espera de recibir la declaración de ruina para ejecutar su demolición por parte de la dirección general de Patrimonio de la Junta de Extremadura. Así lo confirmó ayer el alcalde, José Manuel García Ballestero, que explicó que los propietarios del inmueble tramitaron la solicitud entre los meses de abril y mayo. Respecto al derrumbe, expresó su satisfacción de que no se hayan registrado daños personales. Este se produjo por la mañana en una zona por la que transitan vehículos y peatones y que da acceso a la plaza de San Pedro donde se encuentra el ayuntamiento.

Inmediatamente de caerse parte de la zona de arriba del inmueble, al lugar se trasladaron agentes de la policía local y el propio alcalde acompañado por servicios técnicos municipales. En ese mismo momento se cortó al paso con el fin de evitar daños personales ante posibles nuevos desprendimientos de una vivienda la cual llevaba tiempo que está deshabitada. El alcalde aclaró que «en ningún momento se puede hablar de dejadez de los propietarios», puesto que estos estaban esperando desde hace meses la declaración de ruina de su inmueble para actuar.

El alcalde reconoció que se dan casos en los que los técnicos municipales detectan unas deficiencias en la fachada de algún inmueble y que inmediatamente se reclama al propietario para que lo corrija y evitar males mayores. «Hay viviendas muy antiguas y deshabitadas y hay casos en los que el consistorio remite comunicaciones a sus dueños para que actúen», pero este no ha sido el caso porque los dueños habían actuado correctamente, subrayó.