El presidente del Grupo Socialista en la Asamblea de Extremadura, Francisco Fuentes, transmitió la "satisfacción" de su formación por el inicio hoy de la tramitación del documento de reforma "en profundidad" del Estatuto de Autonomía de la comunidad, y destacó el "amplio acuerdo" alcanzado entre socialistas y populares para su elaboración.

En declaraciones a los medios tras la entrega del texto al presidente de la cámara autonómica, Juan Ramón Ferreira, el responsable socialista calificó como "bueno" el texto de la reforma, que con su registro hoy en la Asamblea inicia su tramitación parlamentaria, y que podría ser aprobado este mismo año de forma definitiva por Las Cortes Generales.

Destacó asimismo que el inicio de los trámites haya coincidido con la celebración hoy del 26 aniversario de la constitución de la Asamblea, y manifestó su deseo de que el texto reformado sirva "para los próximos 25 años" y que, como el actual, "permita que las distintas fuerzas políticas planteen sus alternativas y sus medidas para el futuro desarrollo de Extremadura".

De igual modo, Fuentes insistió en el "consenso" alcanzado entre los dos grupos con representación parlamentaria para elaborar la reforma. "Afortunadamente en democracia no hay nada que separe al cien por cien a las fuerzas políticas", sentenció.

En este sentido, subrayó que "más allá de las controversias normales que hay que cualquier parlamento democrático entre distintas fuerzas políticas, hoy toca poner el foco de atención sobre lo que nos une", porque --declaró-- "ya durante muchos días ponemos el foco de atención sobre lo que nos separa".

En cuanto al contenido del preámbulo, cuya redacción por parte de los grupos parlamentarios terminó esta misma mañana, indicó que explica la "filosofía" de la ley, los objetivos y principios generales, así como todos los sectores que abarcará la iniciativa.

Finalmente, señaló que la norma jurídica de la reforma del Estatuto "no es una novela ni un relato corto" sino que "es más inteligible" que el texto en vigor. Así, resaltó que los dos grupos han procurado que "dentro de la complejidad del lenguaje jurídica" el documento de la reforma sea "lo menos farragoso posible".