En esta vorágine legislativa que se está dando al final de la legislatura, en el pleno de ayer también se aprobó de forma definitiva la propuesta de Ley del estatuto de los Consumidores, un texto tramitado a instancias del PSOE que viene a sustituir a la norma del 2001 para adaptarse a los cambios en los hábitos de consumo y la extensión del uso del comercio electrónico.

Entre sus novedades, el estatuto regula nuevamente sobre las gasolineras desatendidas para solventar las discrepancias con el Gobierno central por la norma que les obligaba a contar con personal durante el día. Así, el estatuto ofrece ahora la posibilidad de que no haya personal, pero en la práctica será improbable que así sea, al menos a corto plazo, puesto que la estación de servicio deberá contar con al menos un punto de suministro accesible que permita a un conductor con movilidad reducida repostar sin bajarse del vehículo.

La reforma ha salido adelante con los votos del PSOE y Ciudadanos. PP y Podemos se han abstenido y el diputado no adscrito ha votado en contra. A la propuesta de ley de los socialistas se habían presentado 143 enmiendas parciales: dos de Juan Antonio Morales, 21 de Ciudadanos, 28 del PP y 17 del PSOE, muchas incorporadas al nuevo texto mediante transacciones.

Para los populares, el texto no viene a solucionar el problema de atención en las gasolineras desatendidas y justificaron su abstención en que de nuevo pueda ser declarado inconstitucional. La formación morada, por su parte, ha criticado la falta de diálogo con las asociaciones de consumidores, mientras que la diputada de Cs ha lamentado la falta de apoyo a sus enmiendas.