Será la evolución de la pandemia de covid-19 y su impacto en el sistema educativo extremeño la que determine si es necesario volver a flexibilizar los criterios de evaluación y promoción de los alumnos este curso que acaba de comenzar, como ocurrió el anterior. Tras más de tres meses sin clases presenciales, la Conferencias Sectorial de Educación aprobó el pasado abril medidas excepcionales que permitieron pasar de curso y lograr los títulos de ESO, Bachillerato y FP con más materias suspensas de las que estipula la ley de educación (entre dos y tres siempre que no sean Lengua y Matemáticas simultáneamente).

Y para el curso actual podría darse una situación similar. El Consejo de Ministros aprobó el martes un decreto, publicado ayer en el Boletín Oficial del Estado, que permite de nuevo a las comunidades flexibilizar los criterios de evaluación para que los alumnos puedan pasar de curso con más suspensos de lo habitual.

Y de momento, en Extremadura no se descarta esta opción, aunque la apuesta de las autoridades educativas extremeñas es mantener la evaluación continua. «Si estamos en un curso atípico en el que se están flexibilizando algunas medidas que atañen a la adaptación del currículo o de las materias, a la flexibilidad de los agrupamientos e incluso a la flexibilidad en la organización escolar, también han de flexibilizarse los criterios de evaluación, donde los estándares evaluables han de ser siempre orientativos y en ningún caso prescriptivos», asegura el secretario general de Educación, Francisco Javier Amaya.

CRITERIOS / En este sentido, señala que la Consejería de Educación ya tiene regulados algunos aspectos de la evaluación para este curso «y seguiremos concretando estos criterios en función de la evolución de la pandemia, siempre partiendo de las circunstancias que viva la región y cada centro». No obstante, destaca que la consejería apuesta por una evaluación continua «porque es la que da al docente los suficientes datos para establecer la calificación final que un alumno debe tener y que le permita promocionar de curso», apunta Amaya.

Según explica, si el curso actual se desarrolla «con cierta normalidad dentro de las circunstancias excepcionales», no sería necesario flexibilizar los criterios de evaluación y promoción, pero si el sistema educativo tiene que volver a enfrentarse a un situación de confinamiento «se podrá valorar otras medidas semejantes a las del curso pasado». Hay que recordar que la decisión final de la promoción se dejó el pasado curso en manos de cada equipo docente. De momento, «los centros escolares están trabajando bajo el principio de la evaluación continua», apunta.