Acaba de finalizar el curso pero desde Educación ya llevan meses preparando el siguiente, que dirá adiós, después de dos años, a las normas covid. Las clases comenzarán en septiembre con total normalidad: sin desdobles (este curso ya no ha habido) ni distancia de seguridad entre alumnos. Tampoco habrá, como ya ocurre desde el último trimestre de este curso, obligatoriedad de llevar mascarillas, que se eliminó cuando se aprobó quitarla en interiores. Sin embargo, este elemento de protección de las vías respiratorias podría recuperarse en los meses de invierno, con el frío, pero eso sí, siempre de manera opcional. «No hay que descartar que, en momentos cuando haga frío, las autoridades sanitarias pidan volver a pedir utilizar la mascarilla, para evitar el contagio de cualquier gripe», avanza el secretario general de Educación, Francisco Javier Amaya.
Desaparecerá también la figura de los coordinadores covid, creada para mantener un contacto directo con las autoridades sanitarias, a las que se debía informar de los positivos que había en las aulas. Desde que se eliminaron las cuarentenas y los aislamientos prácticamente no tiene actividad, aunque Educación mantiene activo un correo electrónico para que los centros, ya sin esta figura de contacto, puedan resolver sus dudas.
Las aulas de la región recuperarán su imagen prepandemia, con la vuelta también a las ratios que había en el curso 2019/2020, con un máximo de 26 alumnos por docente. «El motivo por el que se bajaron las ratios no era por calidad educativa, sino por un motivo sanitario», recuerda el secretario general de Educación, que incide en que «no existe una relación directa, aunque puede ser un motivo que lo favorezca, entre ratios más bajas y una mayor calidad y equidad educativa».
La recuperación de las ratios no conllevará una reducción del profesorado, porque se intensificarán las medidas de apoyo al alumnado a través de la co-docencia, con la presencia de orientadores y profesionales de Audición y Lenguaje y Pedagogía Terapéutica. Este proyecto ya se ha iniciado este curso con la contratación de 250 maestros (se mantendrán) para prevenir la repetición de curso en Primaria y 1º y 2º de Educación Secundaria Obligatoria. «No tiene sentido hacer un desdoble en todos los grupos de la región si tenemos grupos en centros donde con 25 alumnos los resultados académicos son óptimos. Es más efectivo buscar una medida que dé una respuesta a un alumno concreto», agrega Francisco Javier Amaya.
El curso comenzará finalmente el 12 de septiembre, después de que la consejería diera marcha atrás en su decisión de que empezara el día 6. Extremadura será así, afirma el secretario general de Educación, de las regiones que más tarde inicia las clases, junto a Asturias y Baleares. En el resto de comunidades autónomas el inicio del curso está fijado entre el 5 y el 8 de septiembre. En cualquier caso, Amaya aclara que «en ningún momento la consejería se ha planteado que los docentes se incorporen a finales de agosto», haciendo referencia al malestar que había entre los equipos directivos, que sospechaban que Educación, con el adelanto del inicio del curso al día 6, buscaba que la incorporación de los docentes se produjese a mediados de agosto, como ya ocurre en otras ciudades europeas.
Infantil pierde 30 líneas en dos años por la baja natalidad
El primer curso del segundo ciclo de Educación Infantil ha perdido 30 líneas en dos años en la región debido a la caída de la natalidad y a la vuelta a la normalidad en las aulas. El descenso de los nacimientos, que se deja notar desde 2011, hará que el próximo curso se queden vacías el 40% de las plazas de 3 años en Extremadura. A eso se une la eliminación de las normas covid y los desdobles, que llevaron en el curso 2020/2021 a ampliar las aulas de Infantil para dividir las ya existentes. En total, en la región, hay actualmente 343 líneas de 3 años.
