Emiten una orden de búsqueda sobre las dos hermanas de la vivienda incendiada de Zalamea

El objetivo es abrir nuevas vías de investigación que permitan a la policía obtener posibles nuevas pesquisas

Restos de la casa incendiada en Zalamea de la Serena

Samuel Sánchez

El juzgado instructor del incendio en una vivienda de Zalamea de la Serena (Badajoz) ha emitido una orden de búsqueda y captura sobre las dos hermanas que convivían en la casa, pues hasta ahora no ha sido identificado el cuerpo sin vida hallado en su interior y las labores de rastreo de un segundo posible cadáver en el inmueble han concluido sin éxito.

El objeto de la requisitoria judicial de búsqueda y captura sobre las dos hermanas es abrir nuevas vías de investigación que permitan a la Policía Judicial obtener posibles nuevas pesquisas, han informado fuentes judiciales.

La citada requisitoria, emitida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Castuera (Badajoz), se acomete ante dos circunstancias. Una de las cuales responde al hecho de que la Policía Judicial ha dado por concluidas las labores de búsqueda de un posible segundo cadáver en el interior de la casa tras no obtener ningún resultado.

El segundo factor es que aún, y a la espera de los resultados de la autopsia preliminiar, no se conoce la identidad del único cadáver que fue hallado calcinado en el interior del inmueble.

Este cuerpo sin vida fue localizado por los bomberos horas después de que se iniciara el incendio en la vivienda, ocurrido el pasado 13 de diciembre. En esta casa convivían dos hermanas, de 51 y 54 años, que, según los vecinos, siempre iban juntas a todos sitios.

Cuando los bomberos de la Diputación de Badajoz encontraron un cadáver, todo apuntaba a que tarde o temprano aparecería un segundo, pero tras siete días de búsqueda en el interior de la vivienda no se ha encontrado.

Los trabajos de los bomberos y, posteriormente, de la Policía Judicial se han realizado de manera minuciosa en todas las estancias de la casa, que acabó completamente calcinada y en cuyo interior se alcanzaron más de 800 grados centígrados durante el incendio y que obligó a apuntalar paredes para evitar que se derrumbase.

Las elevadas temperaturas, sumado a la gran cantidad de enseres y basura que había en el interior, dificultaron las labores de los bomberos.

Según ha explicado a la agencia Efe fuentes próximas al caso, los escombros de la casa fueron trasladados a otro espacio de la localidad para que allí la Policía Judicial continuara buscando posibles restos de un segundo cadáver, aunque no se han obtenido resultados. 

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