Trabajo sí, pero seguro

Los trabajadores de las contratas de Repsol YPF de Puertollano anunciaron ayer que seguirán sin acudir al trabajo hasta que la empresa ofrezca "todas las garantías de seguridad", por lo que hoy mantendrán por cuarto día el paro empezado el pasado lunes en señal de protesta por el accidente del jueves 14 de agosto, que se ha cobrado ya seis vidas.

Según explicó en rueda de prensa el portavoz del millar de empleados de las empresas contratistas, que se identifica simplemente como Félix, éstos quieren además que la dirección de la petroquímica se comprometa a cumplir con todos y cada uno de los puntos de la tabla de reivindicaciones "innegociables" que ayer le hicieron llegar a los directivos de la empresa en un encuentro entre ambas partes.

Explicó que los responsables de Repsol les pidieron tiempo para analizar sus peticiones, entre las que figuran medidas sanitarias y de seguridad y, "en principio, parece que tienen buena predisposición", dijo el representante de los trabajadores, que se están organizando al margen de los sindicatos con los que dicen sentirse "traicionados", aunque pidieron disculpas por lo ocurrido en la concentración del lunes cuando increparon a Cándido Méndez y José María Fidalgo, según Efe.

HUELGA INDEFINIDA

En el caso de que la empresa no se comprometa a cumplir con sus demandas (detectores de fugas, clínica en el interior de las instalaciones) los trabajadores han anunciado que iniciarán una huelga indefinida a partir del próximo miércoles, una vez cumplidos los trámites legales de cinco días de notificación previa.

Tras la reunión con la empresa, el millar de trabajadores que no son de plantilla de Repsol guardaron seis minutos de silencio ante el cementerio de Puertollano, donde están enterrados dos de los trabajadores fallecidos, Roberto Fernández Murillo, de 23 años, y Luis Paredes Durán, de 20, que como el resto de las víctimas de este accidente, se empleaban en distintas contratas de Repsol.

Después de este acto de recuerdo para los compañeros muertos tras la explosión del pasado día 14, al parecer, debido a la acumulación de gases, los trabajadores se dirigieron a pie por la avenida del Primero de Mayo hasta el ayuntamiento tras una pancarta en la que se leía Más seguridad. No más muertos . En el consistorio fueron recibidos por el alcalde Casimiro Sánchez Calderón, quien les brindó su apoyo y les comunicó que intercederá para que no tomen represalias por los paros convocados, el cuarto de los cuales tendrá lugar mañana ante las puertas de la factoría.

El regidor municipal, que les reprochó que no hayan acudido antes a plantearle sus inquietudes, les dijo que el municipio no tiene competencias para poner en marcha una nueva comisión de investigación, tal y como han pedido al alcalde estos trabajadores.