Vara aboga por subir los impuestos para garantizar inversiones y servicios públicos

El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, se mostró ayer partidario de una subida de impuestos en España para compensar el descenso de los ingresos públicos --debido a la crisis económica-- y poder garantizar tanto las inversiones como la prestación de los servicios fundamentales sin tener que recurrir al déficit. Este incremento de la carga fiscal, según matizó a este diario, afectaría solo a las rentas más altas y al capital.

Fue en un acto público en Cáceres, en la Facultad de Estudios Empresariales y Turismo de la Universidad de Extremadura (Uex), donde ayer se presentó el balance del Informe GEM sobre la actividad emprendedora en la región entre los años 2003 y 2007. Y lo hizo ante un auditorio en el que predominaban expertos y académicos del mundo de la empresa y las finanzas. "Si yo fuera presidente del Gobierno, en este momento subiría algunos impuestos, porque la vieja teoría de que la bajada de impuestos se traduce inmediatamente en crecimiento económico no es verdad en este escenario de crisis", manifestó durante su intervención.

Para Fernández Vara, en la actual situación de dificultades económicas, en la que las administraciones están sufriendo una importante caída de los ingresos públicos por el parón de la actividad económica, las únicas dos salidas para poder mantener el nivel de inversiones y la calidad en la prestación de los servicios básicos son el déficit público o, como alternativa, la subida de impuestos. La primera opción, bajo su punto de vista, implica trasladar a las próximas generaciones el coste todo lo que es necesario gastar en la actualidad para costear prestaciones como la educación, la sanidad, los servicios sociales y a la dependencia o los proyectos de infraestructura y tecnología que ya hay en marcha.

"Frente a eso hay otro discurso: si es necesario equilibrar las cuentas públicas para no cargar el problema a las generaciones que vienen detrás, vamos a ver si tenemos margen fiscal. De la misma manera que cuando todo iba muy bien y había un exceso de ingresos en las administraciones se pudo bajar los impuestos, ahora que faltan ingresos creo que se puede gravar a las rentas más altas y al capital más de lo que se está haciendo en este momento", explicó a EL PERIODICO el presidente de la Junta.

MEDIDA ESTATAL La propuesta del dirigente extremeño es mucho más concreta. En primer lugar, insiste en que este incremento de la presión fiscal debería gravar solamente a las rentas más altas y a los capitales: "Antes de tocar los impuestos indirectos, que son los que pagan todos los ciudadanos, incluidos aquellos que se están quedando sin empleo y sin ingresos, lo que se debe hacer es aprovechar el margen para retocar los tributos que podemos pagar quienes percibimos rentas más elevadas".

Por otra parte, apuesta por que el Gobierno central sea el que dé este paso, dado que tiene mayor margen de maniobra sobre el sistema tributario. "Las comunidades autónomas no tenemos capacidad y además es una subida que debe aplicarse a todas las regiones para evitar la deslocalización fiscal --es decir, que se creen territorios que puedan atraer población por su menor carga impositiva--", apunta Fernández Vara. En su opinión, esa revisión debería producirse principalmente a través del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).

No obstante, no descarta que en los próximos meses --"una vez que se apruebe el nuevo modelo de financiación autonómica, que nos dará más margen"-- el Ejecutivo regional pueda aprobar alguna medida en esta misma línea. Es decir, una reforma tributaria para revisar las exenciones autonómicas a impuestos que gravan las rentas más altas --por ejemplo, restringir las exenciones en el IRPF--.

El presidente de la Junta no solo defendió esta medida. También cuestionó la opuesta, la de la bajada de impuestos que durante los últimos meses ha pedido el PP como iniciativa para hacer frente a la crisis. "Dicen que si se reducen los impuestos se consume más y los ingresos son mayores. Eso es así cuando las cosas van bien, pero ahora no. En estos momentos de crisis, que exista más dinero en el bolsillo de la gente no quiere decir que se vayan a gastar más. En todo caso ahorrarán más, pero no se traduce en más consumo", advierte. Y como muestra de ello explicó que la caída de precios que se está produciendo actualmente "no está contribuyendo a reflotar la economía, por mucho que cada punto que baja el IPC suponga 180 millones de euros que se quedan en el bolsillo de los extremeños".