El Gobierno municipal quiere que el edificio del colegio Juan XXIII tenga un uso educativo, que sirva a su vez para "poner en valor" el barrio de San Juan en el que se ubica. De esta forma se ha pronunciado la delegada de Educación, Susana Fajardo, después de que la Consejería de Educación y Empleo anunciara ayer su decisión de cerrar este centro educativo el próximo curso académico por la escasez de alumnado que venía registrando en los últimos años.

Pese a que el inmueble es de titularidad municipal, la edil ha indicado que será la Consejería "la que determine en última instancia, de acuerdo a las necesidades que detecten en la ciudad, cuál va a ser realmente el uso". El propio secretario general de Educación, Francisco Javier Amaya, trasladó que el ayuntamiento había exigido que las instalaciones tuvieran un uso educativo y aseguró que se iba a cumplir con esta demanda. "Fue uno de los requisitos indispensables", ha señalado Fajardo, quien confía en que "veremos en muy poco tiempo cuál es la decisión adoptada con respecto al uso".

Sobre las causas del cierre del centro, la edil ha manifestado que el gobierno municipal estaba "muy preocupado" por la situación que venía registrando el colegio en los últimos años, debido a la falta de alumnado y de solicitudes de matriculación. "No era una de las opciones preferidas por las familias en Mérida", ha reconocido Fajardo, además de apuntar que la mayoría de los 39 alumnos no eran del barrio. "Nunca es agradable cerrar un centro educativo", ha lamentado.

Fajardo ha querido agradecer el "esfuerzo titánico" realizado por el equipo directivo y el profesorado para evitar el cierre del colegio, pues "han trabajado intensamente" en los últimos años con la colaboración del ayuntamiento. De la directora Cecilia Chamorro, ha dicho que "se ha batido el cobre literalmente por sacar el centro adelante", con un programa "aprendizaje-servicio que ha puesto en marcha en los últimos años, pero que lamentablemente no ha sido del agrado de las familias o no ha llegado al conocimiento de estas". Por último, ha deseado "toda la suerte" a los profesores del centro, y se ha mostrado segura de que allá donde vayan "harán un trabajo fantástico".