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MUJERES QUE HACEN EXTREMADURA | CUIDADOSCarmen Molina CañasTrabajadora en residencia de ancianos y ama de casa

«Decimos que el hombre nos ayuda porque nosotras seguimos asumiendo las tareas»

«Decimos que el hombre nos ayuda porque nosotras seguimos asumiendo las tareas»CEDIDA

Carmen Molina Cañas (Segura de León, 1966) lleva la mayor parte de su vida cuidando y no solo porque actualmente trabaje en una residencia de ancianos del municipio que la vio nacer. Se casó joven y en un contexto social en el que toda la carga de las tareas del hogar recayó sobre sus hombros. Ahora es abuela y bisabuela y habla con perspectiva sobre los avances que se han hecho y las tareas pendientes.

¿Cómo ha sido conciliar trabajo y hogar?

Depende mucho de la forma de ser de cada quién. En mi caso, me adapté. Me casé joven, con 21 años ya tuve a mi primera hija y todo el peso de la casa lo tuve yo. A mi marido tenía que hacérselo todo: comida, ropa, etcétera. Lo llevaba todo para adelante, aunque tuve que dejar de trabajar un periodo corto de tiempo para poder cuidar a los hijos. No duró mucho, porque al final en casa también hacía falta el dinero y volví a trabajar.

Actualmente, ¿siguen recayendo esas tareas en la mujer?

La pareja ahora ayuda más que antiguamente. Antes se tenían muchísimos hijos y todos se llevaban para adelante, pero la mujer era la esclava de la casa para esos niños. El único que salía era el padre. Entonces, en la actualidad, al salir los dos a trabajar, algo se ha cambiado. La presencia masculina en el hogar para hacer las labores yo la voy notando. Por ejemplo, me quedé viuda con 43 años y ahora tengo otra pareja que me ayuda en casa. Pone la lavadora si no estoy, hace de comer si no estoy… El marido de una de mis hijas también colabora en casa y escucho a compañeras mías en el trabajo decir que los hombres ayudan en casa. Pero, aunque el hombre ya está más metido en estas cosas, seguimos diciendo que nos ayudan, porque lo seguimos asumiendo nosotras. Se debería entender que también es su casa.

Respecto al ser madre joven, ¿ha notado cambio en la mentalidad social?

Ahora son un poco más juzgadas. Creo que es porque hoy en día no debería pasar esto por los avances. Se suele estar más preparada. Son jóvenes y ya un niño te limita. Mi nieta, por ejemplo, si una noche quiere salir de discotecas y yo trabajo, pues ya no puede porque se tiene que quedar con su hija. Se va si yo no trabajo. También suelen tardar más porque ahora, en general, trabajan las dos partes o quieren estabilidad.

¿Recae todavía la crianza de los hijos más en la madre que en el padre?

En mi caso, me quedé embarazada con 21 años. Una de mis hijas se quedó embarazada con 15 años y, luego, su hija que es mi nieta también tuvo otra hija con 15 años. Para que mi hija pudiera continuar sus estudios, que se fue a Huelva a estudiar psicología, me encargué de criar a mi nieta. Como mi madre también era joven, cuando yo tenía que trabajar, al final me ayudaba ella a mí. En el caso de mi hija, se tuvo que volver porque tuvo problemas con la pareja, él la juzgaba porque se había ido y había dejado a la niña conmigo. Entonces, mi hija entró en depresión y se volvió. Con mi nieta ha pasado lo mismo, ella trabaja y nos organizamos con la otra abuela también para cuidar a la niña. Lo que no suele pasar es que sea él el que se encargue de la crianza, al menos es lo que yo he vivido.

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