Solo tres días después de que el jurado popular constituido para juzgar a Ahmed Benali por la muerte de su casera, una mujer de 85 años, emitiera su veredicto, la Audiencia Provincial ha impuesto la pena: 29 años de prisión.

A las 13.00 horas del pasado martes, tras una mañana de juicio, y una tarde y una mañana de deliberación, los nueve miembros del jurado popular, por unanimidad, declararon probado que la mañana del 3 de agosto del 2008 Benali, de 45 años, 1,93 metros de estatura y 85 kilos de peso, mató a su casera, viuda de 85 años, a golpes y asfixiándola con un cojín con el que la tapó el rostro.

Lo hizo en la casa en la que la anciana vivía en Plasencia --ella residía en el primero y él ocupaba el segundo--, en su habitación, donde sobre su cama, como el propio autor reconoció en el juicio, la golpeó brutalmente y de forma reiterada y, además, declaró también probado el jurado, "le introdujo los dedos en la vagina con ánimo de satisfacer sus deseos sexuales". Declararon probados estos hechos, o lo que es lo mismo, declararon a Benali culpable de asesinato y también de violación, delito este que él reiteradamente negó haber cometido.

En base a su veredicto, la presidenta del Tribunal ha dictado su sentencia. Impone a Ahmed Benali una pena de 16 años de prisión por el delito de asesinato --el fiscal pedía 18 y la abogada de los hijos de la fallecida 25-- y 13 años por un delito de violación agravada --fiscal y acusación pedían 14 y 15 respectivamente--.

Por su parte, el abogado de la defensa, que según adelantó ayer a este diario recurrirá la sentencia de la Audiencia ante el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx), había pedido una condena de 21 años --15 por homicidio, al considerar que no se había acreditado la alevosía y por tanto no era imputable el delito de asesinato; y 6 años por la agresión sexual, pena mínima por estimar que en este caso no había quedado demostrado en el acusado deseo carnal--.