¿La inversión en gastos sociales es la preocupación principal de los ayuntamientos de todas las ciudades de España? Responder a esta pregunta solo puede hacerse en base a datos. En algunos de los municipios españoles se destina una gran cantidad de dinero a estos servicios y en otros la cifra es inferior. Las personas en riesgo de emergencia social son los que más necesitan ayuda y no todos la reciben.

En este contexto, ¿en qué situación se encuentra Cáceres? La capital cacereña es la que más dinero destinó a asuntos sociales de Extremadura en 2016, gastando 40,23 euros por habitante, según el ayuntamiento. En 2017 también obtuvo esa posición a nivel regional con un desembolso de 41,57 euros, en base al informe elaborado por la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales que recoge los datos correspondientes al presupuesto liquidado de 2017, publicado por el Ministerio de Hacienda el 28 de diciembre de 2018. Pero ¿cuál es la situación de Cáceres en el contexto nacional? La ciudad, aportando 41,57 euros, se encuentra a la cola entre los ayuntamientos con inversión precaria en servicios sociales.

El documento que acredita estas cifras recopila información adjunta de 404 ayuntamientos con más de 20.000 habitantes, categorizados en tres vertientes: excelencia en inversión en servicios sociales, los que destinan un valor superior a los 100 euros; precarios, no llegan a 50 euros y pobres, apenas rozan los 40 euros. Aquellos que invierten una cantidad de entre 50 y 100 euros no se encuentran en ninguna lista al tratarse de un gasto normal. La capital cacereña está en la tercera posición por la cola del segundo ranking. Por lo que se encuentra entre los ayuntamientos más precarios en servicios sociales.

El gobierno local remitió recientemente una nota de prensa en la que mostró su satisfacción por esta cifra ciñéndola únicamente al contexto regional y no naciona. En este sentido comparó la posición de Cáceres con la del resto de municipios de la región que aparecen en el documento de 2016 y no del último, que es de 2017. A pesar de que la diferencia con Badajoz, que se encuentra en la lista de ayuntamientos pobres en estos servicios, es tan solo de 1,68 euros, ya que invirtió 39,89 euros por habitante, lo que la sitúa a seis consistorios por debajo de Cáceres. En ese mismo listado, pero con una inversión menor, se encuentran Don Benito (30,28 euros), Mérida (27,69 euros), Plasencia (26,76 euros) y Almendralejo (17,04 euros). La capital pacense aumentó un 7,3% entre 2016 y 2017. Mientras que en Cáceres el incremento fue de un 3,3%.

PSOE, Podemos y Cs

Los grupos municipales cacereños de la opisición coinciden en que «no hay que sacar pecho de esto». Todos aseguran que sería oportuno compararse con cifras altas y no con las que estén por debajo. Por ejemplo, con el ayuntamiento que más dinero destinó a este servicio. Este último fue el de Rentería, en el País Vasco, con 275,74 euros por persona.

Para el PSOE municipal no es un gasto del que sentirse orgulloso. Considera que lo oportuno es compararse con «los mejores» y no con los que «peores» datos ofrecen. Además, no está seguro de que en esas cifras se englobe un gasto puramente social, sino que también podrían estar incluidos aquellos en colaboración por la ciudadanía; es decir, el dinero que se destina a campamentos urbanos, por ejemplo, «que nada tiene que ver con asuntos sociales». Por otro lado, el grupo socialista muestra su intranquilidad ante lo que considera «despreocupación en general» que existe sobre este asunto. «Igual que en tecnología se avanza también es necesario hacerlo en asuntos sociales, son primordiales», apunta María José Pulido, concejala socialista.

Por su parte, Podemos considera que no se puede presumir de la cifra y asegura que hay una parte de la población que «está muy mal y se encuentra en una situación de emergencia social». No hay que mirar a los municipios que lo pasan peor sino ponerse la meta de salir del listado de ayuntamientos precarios para poder compararse con «los que más invierten». Así lo indica Consuelo López, concejala de CáceresTú. También apunta que las ayudas del Imas, aunque «sean muchas deberían ser más». El ejemplo está, a su juicio, «en que oenegés y asociaciones trabajan para ayudar a los ciudadanos que lo necesitan». La formación morada planteó un plan de rescate a principios de la legislatura con el que se consiguió que hubiera una ordenanza que recogiera todas las ayudas y aumentaran, aunque no incrementó tanto como exigían. «No es un logro estar los primeros en Extremadura, hay que compararse a nivel nacional al igual que nos comparamos con las infraestructuras o con el tren», apunta. La gente es lo primero, y lo dice el eslogan de la campaña del grupo municipal CáceresTú. En esa línea argumentaria López concluye: «salgamos de esa zona de precariedad, no puede haber ciudadanos de primera y de tercera. Qué menos que todos con una vida digna».

Finalmente, el grupo Ciudadanos califica la cantidad como «ridícula, casi miserable, con la que es imposible poder satisfacer las necesidades de tantas personas con carencias». Igualmente, sostiene que el consistorio no se compromete con estos ciudadanos «y que encima se comparen con otros ayuntamientos que se encuentran en peor situación es patético. Mar Díaz Solís, concejala de Cs, destaca que el Imas termina algunos ejercicios con remanencia, lo que «es insólito», por la cantidad de necesidades que hay en la ciudad. Por ello, estima que existe falta de comunicación y de información por parte del Instituto Municipal de Asuntos Sociales. «Muchos de los que buscan ayuda no se enteran, la gestión debería revisarse para saber dónde falta más y dónde menos. Casi siempre se dan las mismas ayudas, incluso la misma cantidad».