La empresa que pretende la explotación de la mina de litio de Cáceres, Infinity Lithium, ha alcanzado un principio de acuerdo con el ex líder de Ciudadanos, Cayetano Polo, para asesorarle en su cometido y conseguir que pueda salir adelante el proyecto. Así lo han confirmado fuentes cercanas a la empresa, señalando que, de momento, lo que existe es un principio de acuerdo, si bien queda pendiente saber si será una contratación directa o a través de la propia empresa de Polo, Ecosistema 44, dedicada a la ingeniería medioambiental.

Su labor sería de asesoría y relaciones institucionales. El objetivo es claro: sacar adelante el proyecto de la mina de Valdeflores, actualmente con gran oposición ciudadana, además de política, donde el ayuntamiento cacereño juega un papel fundamental. Infinity Lithium, de capital australiano, cuenta con muy escasa presencia en Extremadura. David Valls es su director de operaciones en Caceres, pero la empresa no cuenta con un interlocutor claro. La contratación de servicios de Cayetano Polo vendría a suplir este hándicap dado que Infinity Lithium está empeñada en sacar adelante el proyecto de extracción de mineral en Cáceres pero también sabe que debe captar la atención de la sociedad civil y de las instituciones locales, provinciales y regionales.

Cayetano Polo anunció el pasado 24 de septiembre su baja en Ciudadanos, dimitiendo como diputado regional de la Asamblea de Extremadura. Sus "discrepancias" tanto en la elección de órganos del partido como sobre los pactos alcanzados tras las elecciones del pasado año en ayuntamientos y comunidades, fueron el motivo que alegó para su marcha dejando la política activa a pesar de haber sido candidato a la presidencia de la Junta en mayo de 2019 y coordinador regional de la formación naranja. Lo cierto es que la dirección nacional de Ciudadanos había decidido aupar a un nuevo coordinador regional, David Salazar, apartando a Cayetano Polo de esta labor aunque siguiendo como diputado.

Cayetano Polo es ingeniero de montes de profesión. Fue concejal del Ayuntamiento de Cáceres de 2015 a 2019 y después diputado autonómico desde 2019 hasta septiembre de 2020. Como líder político no ha mostrado nunca oposición al proyecto de Valdeflores sino todo lo contrario, ha dicho estar de lado de la legalidad y considera que la decisión sobre su licencia debería basarse exclusivamente en criterios técnicos.