Desde el 1 de enero de 2013, cada comerciante tiene libertad para establecer sus propios períodos de rebajas, descuentos y promociones sobre los artículos que desee y durante el tiempo que le convenga. Así lo estipula la nueva ley de comercio aprobada por el Gobierno en 2012. No obstante, la mayoría de las tiendas cacereñas han optado por mantener los precios de temporada durante el periodo navideño y sumarse al calendario oficial de rebajas, que sigue existiendo en cada comunidad a modo orientativo. Extremadura las iniciará el 7 de enero hasta el 6 de marzo. No obstante, muchos establecimientos sí ofrecen ya algunas promociones jugosas para atraer al cliente en estas fechas de especial consumo.
"No hay un criterio a seguir, unos están directamente de rebajas, otros ha iniciado ciertos descuentos y otros esperan. Depende del baremo que cada empresario pueda hacer de sus ventas, pero la mayoría va a esperar a la fecha tradicional después de Reyes", explica Yolanda Cordero, responsable del Centro Comercial Abierto, integrado en la Asociación de Empresarios del Comercio de Cáceres (AECA). La razón, según los profesionales consultados por este diario, es obvia: existen grandes marcas que utilizan las rebajas como estrategias de venta e incluso fabrican para este periodo, pero el pequeño comercio tiene los descuentos como último recurso para vender los restos de temporada, y por tanto no puede bajar los márgenes antes, y menos en los tiempos que corren.
No obstante, la misma situación se repite en muchas ciudades. Incluso los grandes almacenes y las franquicias de más peso esperarán a que avancen las Navidades antes de iniciar los descuentos agresivos. Es evidente que 2013 ha sido un ejercicio muy duro para el comercio, y ahora que llega la época de mayor consumo hay que calcular muy bien las estrategias para no perder clientes pero tampoco beneficios, que falta hacen. "Al no tener industria, la crisis tardó más en entrar Cáceres, pero ahora también tarda más en salir", indica Mercedes Serrano, comerciante.
Y es que la capital cacereña no comparte las buenas perspectivas navideñas de otros puntos del país. Dicen las previsiones que cada extremeño gastará una media de 746 euros en las compras, por debajo de los 800 euros de media nacional y con una ligera contención del consumo respecto al año anterior. Las tiendas de la ciudad consultadas por este diario afirman que 2013 ha sido para olvidar, pero notan un repunte durante octubre y noviembre. "Podemos hablar de un 20% más de ventas que en los mismos meses del 2012, el problema es que diciembre y la Navidad han empezado más flojas, de momento", explicaba el pasado martes Diego Mostazo, propietario de Intersport Mostazo.
Tampoco los beneficios son los mismos. Los comercios calculan que, por ejemplo, el tíquet medio en regalos de Navidad se ha reducido un 20% en los tres últimos años, a lo que hay que añadir el abaratamiento de los artículos para animar las ventas. "En una tienda de complementos personales como la nuestra, se viene percibiendo una bajada de 4 ó 5 euros de media en los regalos", señala Elías Molina, comerciante.
FUERTES AJUSTES En cualquier caso, los empresarios aseguran que los fuertes ajustes realizados en sus negocios son los que les permiten continuar y adaptarse a la nueva situación. "Hemos reducido todos los costes posibles, y hemos añadido un esfuerzo personal tremendo. Gracias a ello seguimos adelante y vemos con cierto alivio que hay un poco más de movimiento", afirma Mercedes Serrano. En general, los comerciantes se quejan de la subida de impuestos y de otros conceptos fijos en plena crisis: "Pagamos un 250% más de luz que hace seis años, también ha subido la Seguridad Social de los empleados y las retenciones del IRPF cada tres meses", afirman.
En este contexto, los empresarios cacereños se posicionan mayoritariamente contra la apertura de las grandes superficies todos los primeros domingos de mes, a partir del próximo año. Aseguran que será "la puntilla" a las tiendas tradicionales, que tienen libertad para abrir cualquier día del año pero que en Cáceres no suelen hacer uso de este permiso en domingo. Afirman que no podrían soportar los costes de estar funcionando toda la semana, especialmente con la caída de las ventas. También aseguran que durante los domingos que sí han abierto, sobre todo en ciertas fechas navideñas de mayor consumo, la actividad ni siquiera ha sido notable.
