En el mayo pasado, la plantilla al completo de TCAE (Técnicos en cuidados auxiliares de Enfermería) de la sexta planta de traumatología y neurocirugía del San Pedro de Alcántara trasladó sus quejas a este diario debido a una situación que arrastran desde hace más de un año y que les está suponiendo una sobrecarga de trabajo durante su horario laboral. Las 17 empleadas que conforman la plantilla llevaron el problema a los distintos órganos de dirección del centro sanitario, e incluso remitieron un escrito firmado por todas a la Junta de Extremadura, en el que denunciaban las condiciones de trabajo a las que están sometidas. Según las auxiliares, en la unidad, que cuenta con 45 plazas y están todas ocupadas por pacientes, hay solo cinco TCAE en el turno de mañana (en fines de semana y festivos son cuatro), por tres durante la tarde y dos por la noche. Eso conllevó que, en este último caso cada auxiliar debió encargar de 22 o 23 pacientes durante su jornada nocturna.

La situación, afirmaron, perjudicaba tanto a las propias empleadas como a los pacientes, que no pueden recibir ni la atención ni los cuidados que requieren. «Son personas con deterioro físico y neurológico severo que necesitan múltiples cuidados. Tienen sus funciones motoras abolidas y llegan a la unidad con traqueostomía, sondaje vesical, nutrición enteral... Necesitan movilización pasiva cada tres horas, transferencia de cama a sillón dos veces por turno», mantenían. Así mismo, existía otra circunstancia que agravaba el problema y es que se daban casos en los que las auxiliares de la unidad tenían que hacerse cargo también de pacientes derivados desde otras unidades (digestivo, medicina interna, cirugía vascular, oncología, urología...). Este problema, según las TCAE, comenzó a raíz de la implantación de la unidad de neurocirugía en enero del 2014, que no se vio acompañada con un aumento en proporción del personal de Enfermería.