Ya no son tan niños y vuelven a casa para demostrarlo. Los ñiños de los ojos rojos, una de las bandas insignia de la capital cacereña, volverán a pasear sus características faldas escocesas y su folk de mezcla este sábado en la renovada sala Capitol para hacer ver que el tiempo pasa para todos. Los cacereños cumplen de hecho veinte años sobre los escenarios y lo hacen con un trabajo bajo el brazo, Regreso a la comarca, un disco que como bien reza en su título pretende ser una «vuelta a los orígenes». Este diario charla horas previas al concierto con Héctor Alviz, el único integrante que conserva la banda de la formación primigenia.

El músico tiene claro que son «una familia». Kilométrica ya. Después de años, este último disco ha supuesto no solo un retorno a Cáceres sino a la forma de hacer las cosas. «Hay un folk más de raíz», sostiene Alviz. Con siete giras mundiales a sus espaldas y enfocados hacia un público más internacional en estas dos décadas no dejan de guiñar siempre a Cáceres. «Queremos a nuestra tierra, se extraña cuando estás fuera», pone de manifiesto.

En cuanto al formato del directo de este sábado, el músico avanza que será un gran «espectáculo» y confiesa que aparte del espectáculo musical en el que interpretarán los temas, se rodearán de actores y actrices de la Escuela de Arte Dramático de Cáceres para recrear «la comarca» mientras dure el concierto. «Será divertido», advierte. Las entradas ya están a la venta por ocho euros anticipadas en Ripley, Nuevo Rialto y Materterra y en la taquilla de Capitol (el día del concierto costarán 10 euros).

Mientras perfilan el directo de mañana y la vuelta a Badajoz y otras tantas fechas cerradas para el año --no estarán ni en Extremúsika ni en Womad-- ya trabajan en el quinto disco. De momento, Alviz no avanza ningún detalle pero augura que a mediados de 2019 ya presentarán un adelanto de cinco o seis temas antes de que salga a la venta en formato físico y plataformas digitales. «Será el mejor de calle, el mejor producido, tiene muy buen material». Entretanto no tienen pensado hacer una pausa. «No vamos a parar», concluye Alviz y augura larga vida al folk. GEMA GUERRA