El Manchester United logró anoche el pase a los cuartos de final de la Liga de Campeones tras destrozar al Milán (4-0) con otra gran actuación de Wayne Rooney y en el día en el que David Beckham volvía a Old Trafford como visitante. Dos goles del delantero red en los primeros minutos de cada parte dejaron visto para sentencia un encuentro que ya se presentaba complicado para los italianos después de encajar en San Siro un 2-3. Un balón perdido por Ronaldinho a los dos minutos de juego retrataría el calvario que pasó el Milán, que en ningún momento tuvo opciones de remontar ante un conjunto inglés que se mostró implacable.