Manolo Sánchez, entrenador del Cacereño, guarda un recuerdo muy especial de Juan Carlos Arteche. "Coincidimos unos meses en el Atlético, en la temporada 88-89, que fue la primera mía en el equipo y la última suya. Luego ya hemos seguido manteniendo el contacto. Era una persona extraordinaria, de verdad", afirma. A Arteche, Manolo lo define como "un tipo bonachón y campechano, con un corazón enorme. Yo ya sabía de que tenía esta enfermedad tan grave, pero teníamos la esperanza de que pudiese salir de ella. Es una pérdida grande, no solo como gran futbolista que fue, sino como persona". Y es que, añade, "tenía un gran pundonor como jugador, fue un símbolo para el Atlético de una época, pero sobre todo fue un tío bondadoso". J. O.