El presidente del PP de Extremadura, José Antonio Monago, criticó ayer la suspensión de la actividad programada en los hospitales extremeños del 3 al 11 de diciembre, lo que, a su juicio, supone un «cierre» de los centros hospitalarios de la región durante ocho días consecutivos. Así lo denunció ayer Monago durante su visita al municipio pacense de Alcollarín, tras hacerse eco de las denuncias de algunos profesionales sanitarios que dicen que son obligados a cogerse vacaciones durante estos días para compensarles por los días libres que se les adeudan. El líder de los populares extremeños alertó de las consecuencias negativas que esta medida «incomprensible» puede tener sobre las listas de espera sanitarias, que podrían «incrementarse notablemente» con el cierre de las consultas externas y de los quirófanos durante todos esos días. Monago recordó al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, que el problema de financiación del SES «también lo había antes», con la diferencia de que «nunca» se tomó una decisión que en la práctica supone, a su juicio, el cierre de los hospitales extremeños.

Por su parte, la Junta de Extremadura respondió ayer al PP que «no se cierra nada» y que «no hay motivos para crear una alarma injustificada entre la población», después de que el PP efectuara la denuncia anterior. «Los quirófanos permanecerán en funcionamiento, igual que los servicios de pruebas, las Urgencias, las hospitalizaciones, la Atención Primaria» y otros servicios sanitarios, han asegurado desde el Gobierno regional.

Desde la administración regiona, explicaron que, como en cualquier otro puente entre festivos, «se hará la reprogramación necesaria para adecuar la actividad, teniendo en cuenta tanto la menor demanda asistencial que se da en los puentes, como la obligación que existe, conforme a la Ley, de conceder los días libres que les corresponden a los profesionales sanitarios». La reprogramación de la actividad de los centros sanitarios en períodos de vacaciones y puentes, según recordaron, «se viene haciendo de manera similar desde hace años, y no hay motivos para crear una alarma injustificada entre la población».