Todo fue excepcional en la entrega de los XIX Premios Espiga de Jamón Denominación de Origen Dehesa de Extremadura y del III Premio Espiga de Cava que se realizó en la fincal El Toril de El Carrascalejo a finales de octubre. ‘Extrem’ fue la palabra clave, ya que tanto el cava ganador como el mejor jamón ibérico del mundo tienen ‘Extrem’ en su nombre comercial. Efectivamente el jamón ‘Extrem Puro Extremadura’ y el cava ‘Extrem’ de Bonaval, de Bodegas López Morenas, han sido galardonados con sendos premios Espiga de Oro, que concede Caja Rural de Extremadura para impulsar y apoyar las producciones agroalimentarias más selectas de la región.

La entrega de los Premios Espiga al Jamón DO Dehesa de Extremadura y al Cava tuvieron como maestro de ceremonias al cocinero televisivo Antonio Granero y fue conducida por la responsable de Relaciones Institucionales de la entidad, María Navarro.

Al inicio de la gala de entrega de premios, el presidente de Caja Rural de Extremadura, Urbano Caballo, destacó el «alto nivel» de los participantes en estos certámenes, tras lo que reafirmó la apuesta de la entidad extremeña por los productos de la región. El presidente de acercó a su atril la nueva estatuilla que se entrega a los ganadores de los premios Espiga. En ella se funde el mapa de la región con el logotipo de la Caja Rural de Extremadura. «Es algo que siempre tiene que estar presente con nosotros, ligados como estamos a nuestra tierra». Recordó que el año pasado anunció que en el presente habría un reconocimiento para los ganaderos, como así fue. «La trazabilidad del cerdo está perfectamente diseñada por eso sabemos dónde y quién ha criado a ese cerdo ibérico puro, que después nos proporciona los mejores jamones del mundo», dijo.

En cuanto al Premio Espiga de Cava, Urbano Caballo destacó que los cavas extremeños «pueden estar en el mercado nacional» debido a que presentan igual o mejor nivel de los que se producen en el resto del país. «Los catadores los consideran vinos de primera, con limpieza, personalidad y estilo actual. Pueden competir en el mercado al mismo nivel que cualquier otro producido en cualquier otra región de España, o espumosos internacionales», comentó.

Así, y debido a la alta calidad de los cavas presentados a concurso este año, el presidente de Caja Rural de Extremadura anunció para el próximo año, la cuarta edición del Premio Espiga de Extremadura se celebrará en una fecha diferente al del jamón, ya que este certamen cuenta con entidad suficiente para contar con un certamen independiente. «Desde Caja Rural de Extremadura creemos, hemos creído y apostamos por los productos de nuestra región», concluyó. Además, destacó la escasa diferencia de puntuación entre los ganadores y animó a los productores a seguir elaborando cavas y jamones DO de tanta excelencia.