Britney Spears ha querido tranquilizar a los numerosos fans que siguen preocupados por su salud mental con un vídeo que ha colgado en su cuenta de Instagram asegurando que está más feliz que nunca.

Spears, de 38 años, publicó un vídeo el pasado lunes en el que menciona las persistentes informaciones que aseguran que la estrella del pop no consigue salir del bache en el que está sumida desde hace uno años.

"Sé que ha habido muchos comentarios y mucha gente diciendo muchas cosas diferentes sobre mí, pero solo quiero que sepan que estoy bien", afirma la intérprete de 'I Wanna Go'. "Estoy más feliz de lo que he estado en mi vida", agrega la artista estodounidense.

Desde hace meses, un pequeño pero ruidoso grupo de fans ha lanzado la campaña #FreeBritney que busca poner fin a la tutela ordenada por un juez estadounidense, después de que Spears fuera hospitalizada para recibir tratamiento psiquiátrico en el 2008.

Creen que la cantante de 'Womanizer' está prisionera en su casa de Los Ángeles y que está enviando señales crípticas pidiendo ser liberada a través de los post que cuelga en sus redes sociales, que generalmente consisten en 'selfies' o bailes. Además, otros fans han expresado su alarma por las repetidas publicaciones en Instagram de las mismas fotos, aparentemente tomadas hace años.

TUTORÍA HASTA EL 2021

Después de un paréntesis, Spears retomó su carrera artística con altibajos publicando varios discos y haciendo shows en Las Vegas, pero volvió a ingresar brevemente a un centro de salud mental el año pasado. La artista no ha actuado públicamente desde octubre de 2018.

El pasado mes de agosto, Spears intentó que fuera revocada la sentencia que otorga la tutoría legal a su padre. Britney había pedido que su abogada, Jodi Montgomery, reemplazara de forma permanentemente a su padre Jamie Spears como administrador único de sus bienes, pero la audiencia judicial, que se reunió a puerta cerrada, dictaminó que la resolución sigue vigente hasta febrero del 2021.

Uno de los últimos vídeos de Britney en Instagram.

Spears ha vendido más de 100 millones de discos en todo el mundo, lo que la convierte en una de las artistas musicales con mayores ventas de la historia. Entre sus negocios se encuentran su propia línea de moda, que incluiría ropa deportiva, lencería, zapatos, perfumes y gafas de sol, entre otros complementos.