La modelo Gisele Bündchen como Wendy y el bailarín Mikhail Baryshnikov como Peter. Así imaginó la fotógrafa Annie Leibovitz a los personajes del clásico Peter Pan. Y con ellos ha recreado la escena en la que el niño eterno se asoma a la ventana de Wendy para llevarla al País de Nunca Jamás, el lugar mágico en el que todo es posible y en el que no es necesario crecer. La magia de los cuentos de hadas convertida en protagonista de la última sesión de Leibovitz, un trabajo con el que Disney celebra en sus parques estadounidenses el Año del Millón de Sueños.

Cada uno de los clásicos de la factoría Disney se ha recreado para la ocasión con todo detalle. No falta ni una de las historias que han hecho de Disney un sinónimo de fantasía: Blancanieves, La Bella Durmiente, La Cenicienta, Alicia en el País de las Maravillas, Pocahontas y Aladino. El vestuario y las escenografías han sido reproducidos cuidadosamente, sin traicionar el imaginario de las películas Disney.

Han sido el prestigio de Leibovitz y la admiración que Hollywood le profesa los que han hecho posible este cuento de hadas en el que David Beckham se convierte en el príncipe valiente de La Bella Durmiente y Scarlett Johansson, en la Cenicienta.

Jennifer López y su marido, Marc Anthony, subieron a la alfombra de Aladino, una historia para la que Whoopi Goldberg se transforma en el genio de la lámpara. La actriz Jessica Biel ha sido retratada como Pocahontas, mientras que la protagonista de El jardinero fiel , Rachel Weisz, se hizo con el papel de Blancanieves. También la cantante Beyoncé ha prestado su figura al personaje de Lewis Carroll, Alicia en el País de las Maravillas.