Una vez que la fusión del colegio público Campo Arañuelo y las Escuelas Concha, en las que se impartía educación infantil, ha sido aprobada por parte del Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura, los profesores de las Escuelas mantendrán la antigüedad laboral que poseían como docentes de dicho centro educativo. Antigüedad que les permite entre otros privilegios la elección de horarios para impartir sus clases.

Esta situación no se hubiera producido si el colegio Campo Arañuelo hubiese absorbido a las Escuelas Concha, según fuentes de la asesoría jurídica del sindicatos independiente de profesores ANPE.