La trastienda

La pelota en el tejado

La convocatoria de elecciones generales por parte de Sánchez rompe los esquemas de constitución del gobierno en Extremadura

Vaya y Guardiola en un acto de Iberdrola en Mérida este miércoles.

Vaya y Guardiola en un acto de Iberdrola en Mérida este miércoles. / JORGE ARMESTAR

Antonio Cid de Rivera

Antonio Cid de Rivera

El miércoles antes del 28M saltaron todas las alarmas en el PSOE extremeño cuando eso que llaman tracking, que no es otra cosa que un sondeo diario, les daba una bajada de 34 a 29 escaños. No había riesgo extremo porque Unidas Podemos estaba en 4 diputados y la suma de PP y Vox se quedaba en 32, uno por debajo de la mayoría absoluta. El jueves se respiró porque la misma encuesta les situaba en 30 y el viernes ya en 31. Se podía afrontar el fin de la campaña electoral en positivo aún perdiendo la mayoría absoluta. Después vino el tsunami Feijóo/Guardiola, el empate a 28 escaños y la suma de PP y Vox para alcanzar el gobierno regional. El partido entró en shock y su líder quedó noqueado como el boxeador que recibe un gancho directo y cae a la lona aún sin saber muy bien qué ha pasado. Guillermo Fernández Vara tardó dos días en despertar y fue después de que Pedro Sánchez convocara las elecciones generales para el 23 de julio y su partido le dijera dónde vas entregando las armas, al menos muramos peleando y dejando en evidencia al PP.

Dicho y hecho. Vara se contradijo y pasó del «me marcho» al «vamos a intentar gobernar» porque para eso hemos ganado las elecciones aunque sea por 6.200 votos y Guardiola no tuvo más remedio que modificar su discurso desde el «quiero un gobierno en solitario» a «habrá que sentarse con todos, incluido Vox». Y así estamos desde entonces y así vamos a seguir no se sabe cuánto tiempo, con una prórroga electoral de casi dos meses y un impasse en el gobierno regional que quién sabe hasta cuándo se va a prolongar. Porque las generales lo embarran todo y la formación de un gobierno autonómico con Vox puede interpretarse de muy distinta manera si es ahora o cuando pasen las urnas de las generales.

La relación Vara/Sánchez ha sido muy perjudicial para los intereses del PSOE extremeño

Lo que sí está claro es que, al final, las elecciones autonómicas y municipales pasadas se han jugado en clave nacional. La prueba más evidente de ello es que el único barón del PSOE que ha resistido la embestida y ha podido mantener la mayoría absoluta, Emiliano García Page en Castilla-La Mancha, ha sido quien más se ha enfrentado con Sánchez hasta el punto de darse la espalda. La relación Vara/Sánchez ha sido muy perjudicial para los intereses del PSOE extremeño y lo que ha ganado las elecciones y ha inclinado la balanza entre bloques por un solo diputado ha sido el voto de castigo a Sánchez. Porque uno puede votar a favor o en contra, con la cabeza y el corazón o con las tripas y me temo que esta vez ha habido mucho de lo último, lo cual no deja de ser un acierto de la estrategia del PP.

La pelota está en el tejado de María Guardiola. La candidata del PP ha logrado transmitir una imagen fresca y moderna que ha cautivado al centro moderado. Sin embargo, lo que parecía un camino de rosas con la marcha de Vara se ha convertido en una cuesta empinada con el adelanto de las generales. Por un lado está Feijóo con su mantra de que debe gobernar la lista más votada (aunque ello lleve implícito perder plazas como Extremadura) y por otro la consigna de la propia candidata popular, repetida hasta la saciedad, de que no piensa sentar a Vox en su consejo de gobierno. 

Una u otra cosa tendrá que cambiar, porque de momento ambas se contradicen. Puede que Vox acepte un pacto programático sin implicar un gobierno de coalición, pero parece demasiado difícil viendo otros precedentes y la opinión vertida desde Madrid. La pelea ahora está en que este hipotético pacto se lleve cabo antes o después de las generales. El PSOE va forzar la maquinaria para que sea ya mismo, si no es la semana que viene la siguiente, y el PP todo lo contrario, cuanto más tarde mejor, al menos sin que se contaminen las elecciones generales. Ya veremos.

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