Siembra

Evoca a tantas cosas buenas, a tantas que producen esa sensación de futuro, de riqueza, de progresión en la vida en el amplio sentido que me provoca el mayor de los reproches que se utilice para que alcance los niveles más altos de los sentimientos más negativos en la vida pública. Sembrar odio y mentira. 

Las noticias que nos llegaban de Castilla y León y el campo era demoledoras. VOX siembra, rezaba el lema con el que concurrieron a las elecciones autonómicas. Leía de un representante de los veterinarios de Castilla y León «ya advertimos hace meses de una deriva, que iba a echar por la borda todo el esfuerzo realizado por el sector, encabezado por los ganaderos, para mejorar las prevalencias en Castilla y León. ¿Alguien entiende que en el consejo de dirección de la Consejería no haya un sólo veterinario cuando la producción ganadera supone el 50% de la agraria?». Habían sembrado desde el gobierno el afamado ya mal del negacionismo desde las máximas instituciones. ¿Quién responde ante tal desastre para los ganaderos provocado por la tuberculosis bovina? ¿Los que sembraron en campaña? ¡Enfermedad infecciosa y destructiva que acompaña su origen!

Buscan el odio, la división, la confrontación hasta asfixiar, siembran, pero el fruto aún más venenoso. Ayer, en la Asamblea de Extremadura, convalidábamos el Decreto Ley de Ayudas temporales y Excepcionales a la agricultura y la ganadería afectadas por la sequía. Un Decreto-Ley, aprobado hace apenas unas semanas por el gobierno de Extremadura, tras la reunión de Guillermo Fernández Vara con las Organizaciones Profesionales Agrarias por el que se destinan 37,2 millones de euros para paliar los efectos negativos de la sequía en el sector agroganadero, complementando desde el gobierno extremeño las ayudas puestas en marcha por el gobierno de España en el Real Decreto 4/2023 de 11 de mayo. La única Comunidad Autónoma que lo ha hecho. 

Leo en la prensa a través de Europa Press que las organizaciones profesionales agrarias, en unidad de acción en Castilla y León, se manifestarán el próximo día 15 de junio en Valladolid para reivindicar ayudas urgentes por las consecuencias de la sequía. Continuaba la noticia: la Consejería de Agricultura y Ganadería «que por ahora no ha concretado ni presupuestado un solo euro para paliar el desastre que por la sequía viven las explotaciones agrarias y ganaderas de la comunidad».

Sembraron en campaña electoral la mentira, la división y el exabrupto fanfarrón en el campo para arrasarlo con enfermedad y sin ayuda. La perversión de las palabras de Jacinto Benavente: «la alegría está en sembrar, no en recoger».

La alegría y el orgullo de quienes en Extremadura, desde la estabilidad de un gobierno socialista, mira a los problemas, mira con honestidad y resuelve. Ayer fue una muestra más.

* Filóloga y diputada regional del PSOE 

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