En algún momento hubo alguna duda, pero al final, y tras laboriosas e intensas gestiones, se ha conseguido el objetivo planteado. Tanto el Cáceres Patrimonio de la Humanidad como el Extremadura Arroyo han depositado el aval de 15.000 euros fijado por la Federación Española y los dos clubs extremeños disputarán la próxima temporada la más alta competición nacional de voleibol, la respectivas Superligas masculina y femenina.

"Se puede decir que estamos en la edad de oro del voleibol extremeño". El presidente de la federación regional de este deporte y también máximo responsable del Cáceres, José Carlos Dómine, se mostró ayer exultante ante la confirmación de la noticia, que de paso hace historia en Extremadura al no haber precedentes en la trayectoria de este deporte en la comunidad. En los antecedentes como máximo ha habido un representante regional. Ahora habrá dos, lo cual ha generado ese estado de euforia existente estos días en el estamento federativo y en los propios clubs implicados.

El Cáceres no juega en la máxima categoría desde los años 90, en tanto que el Arroyo logró la permanencia la pasada temporada, tras ascender, con suma solvencia y sin apuro alguno.

AGRADECIMIENTO "Estamos muy contentos y agradecidos a la gente que ha colaborado para que podamos vivir esto. En los tiempos que corren, la Junta y el ayuntamiento nos han ayudado un montón. No solamente ha habido palabras, sino hechos, y eso ya es mucho", significó ayer José Carlos Dómine en declaraciones a este diario.

La gestión clave en el caso del club cacereño, explica Dómine, ha sido la intermediación de la propia Dirección General de Deportes con una entidad bancaria. El jueves fue concretada la gestión del aval en la federación, con la consiguiente satisfacción general. "Han avalado el 80 por ciento para que se nos pueda adelantar el dinero de la subvención de la Junta", detalló.

El problema real era la liquidez. Con ello el presupuesto está cubierto y el dinero para poder hacer el equipo y los primeros gastos está disponible. Aun así, según Dómine, el club será el "más modesto económicamente" de los 12 que compondrán la Superliga.

ROCHA, PRIORIDAD El Cáceres ya está trabajando para hacer un buen bloque para conseguir el único objetivo real la próxima temporada, que será el de la permanencia. La prioridad en estos momentos es la de renovar al entrenador que lideró el ascenso a la Supeliga, Raúl Rocha. Se espera que no haya problemas y que el técnico continúe.

El siguiente paso es el de hacer la plantilla. "El 75 por ciento será de jugadores extremeños". En principio, se harán "tres o cuatro fichajes", entre ellos un extranjero, previsiblemente del este europeo, donde hay jugadores "muy competitivos" y asequibles, en principio, para la economía del cuadro extremeño.

Aún resta concretar dónde y qué día jugará sus partidos como local el Cáceres. Dómine prefiere que la cancha de juego sea la del pabellón Multiusos, aunque esto no está excesivamente claro. La otra opción es seguir en el pabellón El Vivero, escenario del éxito de la pasada campaña.

Mientras tanto, el Arroyo también puede preparar ahora la plantilla para, al menos, volver a ser una formación competitiva. La prioridad será cómo solucionar la ausencia de su jugadora más importante, la internacional moralejana Alba Sánchez, que la próxima temporada ha firmado por el Charleroi belga.

Pero Adolfo Gómez espera que el equipo vuelva a ilusionar en su segundo año entre la superélite del voleibol español. Las brasileñas Flavia Lima y Helen Silva pueden seguir y redondear su sexta temporada en el club.