El anuncio este jueves de las tres diócesis extremeñas de que se podrán organizar las procesiones no cogió de sorpresa a las diecisiete cofradías que hay en la ciudad. «Era algo que se esperaba; si ya se hacían todo tipo de actividades, también las procesiones», comentó este viernes Santos Benítez, que es el presidente de la Unión de Cofradías Penitenciales. Benítez explicó que las hermandades ya trabajan para que en 2022 se pueda celebrar en la ciudad una Semana Santa «con la mayor normalidad posible» dentro de las normas sanitarias que estén en vigor entonces. Esa intención de que sea una festividad «lo más parecida a la normalidad» que había antes de la pandemia también la avanzó el portavoz del gobierno, Andrés Licerán, al término de la junta local de gobierno de los viernes.
La Semana Santa es la festividad que más movimiento económico y de población tiene en Cáceres. Son 17 cofradías, 54 pasos y 24 desfiles procesionales en ocho días. Además en la Semana Santa de 2019, la última que se celebró, hubo 102.000 turistas en la ciudad. Se estima, según los cálculos hechos por este diario, que deja en la ciudad más de 6 millones de euros. A esto se añade que las procesiones movilizan a varios miles de cacereños que están en una o varias cofradías. La celebración de 2022 será especial, los pasos volverán a las calles tras dos años de ausencia.
«Ha sido una situación extraña, pero ha sido una oportunidad de vivir la fe desde otra perspectiva, haciendo una labor social», recordó este viernes Eloy Remedios, mayordomo de la cofradía del Nazareno, una de las hermandades con más miembros, son casi tres mil, y con más historia. En más de quinientos años de esta cofradía «no recuerdo que haya habido dos años seguidos sin salir a la calle», apuntó Remedios.
En la cofradía de la Salud también se está trabajando «de lleno para preparar la Semana Santa, ya hemos mantenido reuniones y se están empezando a planificar los ensayos de los costaleros», aseguró Luis Pedro Cámara, que es el mayordomo de esta cofradía, en la que ya se está «organizando todo» para que la celebración de la Semana Santa del próximo año sea «con la mayor normalidad posible».
Las cofradías «llevan tiempo trabajando en la celebración de 2022» para que se pueda salir a la calle con «toda la normalidad que sea posible», insistió Benítez, que recordó que este mes se celebrará un pleno de las cofradías para hablar de la festividad del próximo año. En los dos años que no ha habido Semana Santa con procesiones en las calles, las cofradías «no han parado» de hacer otras labores propias como su trabajo en materia social, la atención a los cofrades o la restauración y mejora de los pasos, «la vida de una cofradía es más que una procesión», puntualizó Benítez, que recordó, como ejemplo de que se lleva tiempo trabajando en la celebración de 2022, que en la Semana Santa del próximo año habrá un nuevo desfile que se celebrará durante la tarde noche del Martes Santo.
Provincia eclesiástica
En el comunicado que este jueves hicieron público el arzobispado de Mérida-Badajoz y las diócesis de Coria-Cáceres y Plasencia se afirma que las procesiones y otras actividades de culto público «podrán celebrarse siempre que se atengan a las normas y recomendaciones establecidas por la autoridad competente». Con este pronunciamiento se daba luz verde a la celebración de los desfiles con el cumplimiento de las normas sanitarias. El anuncio se realizó este jueves «ante la nueva situación sanitaria en la que caen en desuso las normas dadas con anterioridad», aunque en el comunicado se recuerda que con carácter general seguirá siendo necesaria «la utilización obligatoria de la mascarilla en espacios cerrados y la utilización de solución hidroalcohólicas», así como que «se eviten las aglomeraciones».
Preguntado este viernes por el anuncio de los tres obispos, el portavoz del gobierno, Andrés Licerán, aseguró que es «una gran noticia para Cáceres» por la «importancia» que tiene la Semana Santa en la ciudad y su tirón para atraer a turistas. «Estamos satisfechos de que se vaya recuperando la normalidad dentro de las medidas sanitarias que se tengan que tomar en su momento», comentó.
Fue el 14 de marzo de 2020 cuando la Unión de Cofradías Penitenciales de Cáceres anunció a pocos días de la celebración de la Semana Santa de ese año que se suspendía. Con ese anuncio se seguían las indicaciones de la Conferencia Episcopal Española, que dos días antes había publicado «una serie de recomendaciones sobre la situación actual, entre las que se indica que las procesiones de este tiempo han de suprimirse», según precisó la Unión de Cofradías Penitenciales en un comunicado difundido el mismo fin de semana en el que se declaraba el estado de alarma. La decisión se tomó tras los contactos que los directivos de la unión mantuvieron con el administrador diocesano de Coria-Cáceres y con las autoridades civiles de la ciudad.
Un año y medio después se va retomando la normalidad, un periodo que ha sido «muy distinto» con una actividad en las cofradías «más interna», comentó este viernes Remedios. Sobre la posibilidad de celebrar un acto de gracia con la participación de pasos, aún no se ha tomado una decisión, indicó Benítez, que recordó la petición de los obispos de que se eviten las aglomeraciones.
