El Ministerio de Hacienda entregará este año al ayuntamiento 20,4 millones de euros. La reducción de la cantidad por la cesión de impuestos estatales será inferior a la que se esperaba, es de solo 55.000 euros. Esta caída se compensa con el incremento del fondo complementario de financiación, que aumenta en más de medio millón de euros. En estas entregas que el ministerio repartirá en doce meses no está lo que pueda corresponder a Cáceres del fondo de recuperación europeo.

Esos 20,4 millones son con el IBI la principal fuente de ingresos del ayuntamiento para los presupuestos de 2021. De IBI urbano se presupuestaron 22,1 millones en 2020, pero esta cantidad fue inferior a la que luego se puso al cobro (22,3 millones), por lo que es previsible que en el borrador de las cuentas para este año se superen esos 22,1 millones de euros.

Los concejales Andrés Licerán, portavoz del gobierno municipal, y María Ángeles Costa, concejala de Economía, iniciaron este martes la ronda de contactos con los grupos de la oposición municipal para presentar los primeros números del presupuesto de 2021. Esa primera reunión se mantuvo con el portavoz del PP, Rafael Mateos, y la concejala popular Elena Manzano. Fue solo un primer contacto con los populares.

Sin embargo, los decisivos para el gobierno serán los que se mantengan durante estos días con el grupo municipal de Unidas Podemos (UP), la primera reunión es hoy, y con el concejal no adscrito, Teófilo Amores, ese encuentro es esta mañana. De estos dos encuentros no se esperan resultados, solo será un primer acercamiento con Unidas Podemos y con Amores. Todas son citas telemáticas.

El gobierno socialista de Luis Salaya sumó hace un año con Podemos y Amores los votos que necesitaba para sacar los presupuestos de 2020. El escenario político es ahora distinto, con Unidas Podemos marcando distancia con el gobierno municipal por su gestión de la crisis del coronavirus.

En el encuentro de ayer con los populares, el gobierno adelantó que la cifra de ingresos que se espera es de 70 millones, está en unas cantidades parecidas a las de 2020. Desde el ejecutivo que preside Salaya no se detalló ayer el desglose de esta previsión, se remitió al viernes. De esos 70 millones, más de 40 salen del IBI y de la aportación del Estado por la cesión de impuestos y del fondo complementario de financiación. A lo anterior se suma la previsión de recaudación por otros impuestos y tasas y las transferencias de fondos europeos, el importe de éstas últimas dependerá de si en el presupuesto local de 2021 se han incluido partidas del fondo de recuperación europeo, por parte del gobierno local ya se estaría trabajando en iniciativas que se pudieran financiar, según fuentes consultadas. Estos fondos se deben materializar entre 2021 y 2023.

En la previsión de recaudación para este año volvería a haber ingresos procedentes del impuesto de construcción y canon que tienen que pagar los promotores de plantas fotovoltaicas, según indicaron fuentes municipales. No llegaría a los cuatro millones de euros que se calcularon para 2020, pero sí habría una partida de proyectos que quedan por ejecutar. Además del que está en construcción en Los Arenales y los que se iniciarán en unos días junto al polígono empresarial de Casar, hay otra nueva planta al norte del polígono ganadero cuya tramitación está avanzada. En un principio se especuló con que en 2021 el ayuntamiento podría encontrarse sin este ingreso extra que posibilitó cuadrar el presupuesto de 2020.

Dentro de esos 70 millones no estaría la cantidad en que se incrementaría el presupuesto con cargo a una operación de crédito, un préstamo que se tendría que destinar a inversiones como las del presupuesto participativo. En el presupuesto de 2020 se sufragaba una parte de las inversiones por importe de 1,6 millones con cargo a ingresos corrientes, ahora este dinero, si finalmente se acude a la operación de crédito, iría a gasto corriente, dejando el préstamo para financiar las inversiones y cuadrar los presupuestos.

ENCUENTRO / En el encuentro con los populares no se dio un importe sobre el montante de esta operación de crédito, «-el gobierno- no lo sabe aún», respondió Mateos a preguntas de este diario. El portavoz de los populares reiteró que la posición de su grupo es la de seguir abierto a la negociación, pero no se harán propuestas hasta tener el documento del borrador. Criticó que se hayan perdido tres meses porque con los números que se pusieron ayer sobre la mesa, con una previsión de ingresos similar a la de 2020, se podía haber iniciado la discusión de las cuentas en octubre, mes en el que los populares ya presentaron sus medidas tributarias y presupuestarias para el ejercicio de 2021.

En la cita de ayer también se avanzaron algunas cantidades de gastos. Mateos mostró su desacuerdo con que al plan de ayudas a pymes y autónomos se vuelva a destinar un millón de euros, la misma cantidad que en 2020 y que no permitió tramitar más de un millar de solicitudes que quedaron aparcadas porque se había acabado la consignación presupuestaria. Mateos reiteró que el posicionamiento del PP es que se dote con al menos dos millones de euros. También cuestionó por insuficiente la partida que se pretende destinar a comercio.