Uno de los rivales, el Celta, y una de las visitas más exigentes del campeonato, el estadio de Balaídos, someterán hoy (20.30 horas) al Atlético de Madrid a una prueba de liderato. El duelo está pendiente del temporal que azota Galicia.
El viernes, las intensas lluvias inundaron los aledaños del estadio vigués, además de afectar también al túnel de salida al campo y a los vestuarios, por el desbordamiento del río Lagares a su paso por la zona del campo; y para hoy se prevén de nuevo más precipitaciones en Galicia.
La potencia del temporal determinará entonces si puede jugarse el choque. El Atlético mantiene el plan de viaje previsto --se desplazó ayer a la ciudad-- y cree que se disputará el duelo. "Pensamos en que se va a jugar. No tengo otro pensamiento que ese", dijo Diego Simeone.
Allí vuelve Augusto Fernández, fichado por el club madrileño el pasado 1 de enero del conjunto gallego y que apunta a la titularidad; y allí llega el Atlético una semana después de estrenar el primer puesto, al que regresa un año y siete meses después, con la presión que conlleva. Porque la continuidad en la cima de la clasificación no permite despistes ni derrotas, en un escenario en el que el Atlético tropezó de forma estrepitosa, sobre todo en el juego, el curso pasado (2-0).
Hoy también se juegan los partidos Villarreal-Sportingo (12.00), Real Sociedad-Valencia (16.00), Eibar-Espanyol (18.15) y Las Palmas-Málaga (18.15).
