Si finalmente se cierra la vía, serán muchos los afectados porque se trata de una de las de mayor volumen de tráfico de la comarca. Uno de los perjudicados es el propietario de la gasolinera BP, situada en el kilómetro 8,2, explicaba que "si realmente se corta el tráfico durante dos meses tendremos que cerrar el negocio y las pérdidas ascenderán a 48.000 euros (ocho millones de pesetas). Perderemos la clientela que tenemos y habrá que despedir a los empleados, aparte de las pérdidas que ya estamos sufriendo porque, desde que comenzaron las obras, atendemos a un 50% menos de vehículos".