El incendio que afectó el pasado sábado a la Ribera y el grito de los hortelanos pidiendo medidas urgentes para su mejora hizo ayer reaccionar al portavoz del PP, Rafael Mateos, quien sentenció que Plan de Sostenibilidad Turística en Destino dotado con cuatro millones de euros procedentes de Europa y que el gobierno ha presentado como una acción para mejorar el río de Cáceres, «no actúa de manera directa sobre él sino que son actuaciones en el ámbito del turismo que se desarrollarán en zonas cercanas al Marco».

Mateos insistió en que «de los cuatro millones, más de tres irán a la réplica de la cueva de Maltravieso y otra parte importante a conectar la Ribera con la zona monumental, pero no se puede decir que el montante global sean para mejorar la Ribera porque eso es faltar a la verdad y engañar a los hortelanos».

La Ribera, un paraíso en estado de abandono. JOSÉ PEDRO JIMÉNEZ

El portavoz popular recordó que el alcalde es también concejal de Medio Ambiente, «pero parece importarle muy poco ya que desde que se inició la legislatura ha manifestado que la recuperación de la Ribera era una prioridad y no ha hecho nada, perdiendo además la posibilidad de contar con otros cuatro millones de euros al no haber concurrido a una convocatoria de la Fundación Biodiversidad en el marco de los fondos de recuperación (Next Generation) destinada a la recuperación y renaturalización de cauces fluviales en tramos urbanos».

«La Ribera era una prioridad y sin embargo no era más que otra promesa más», apunta Mateos

Para Mateos «se demuestra una vez más que Salaya no pasa de las promesas y nunca hace aquello que promete. Para el PSOE, «la Ribera era una prioridad y sin embargo en más de tres años de gobierno los ciudadanos han comprobado que eso no era más que otra promesa más», resaltó el dirigente del PP.

La evidente riqueza de la Ribera. JOSÉ PEDRO JIMÉNEZ

Ya en enero los populares criticaron «que se habían dejado escapar estas ayudas destinadas de manera expresa a ayuntamientos de más de 50.000 habitantes, y específicamente a la recuperación de zonas verdes y cauces fluviales, y que se adaptaban a la perfección a las características de nuestra Ribera del Marco»