Sin incidentes reseñables, con alguna retención, pero sobre todo con numerosos peatones tomando las calles del centro y con una cifra nada habitual en el número de usuarios del autobús urbano. Así se desarrolló el pasado jueves en Cáceres el ‘Día Mundial sin Coches’, cuya valoración ha sido ofrecida este viernes por la portavoz municipal, María José Pulido. La jornada ha dejado de ser meramente simbólica en la ciudad y ha ido más allá de un gesto de concienciación con un futuro sostenible. «Nos debe servir como ensayo de lo que será nuestra ciudad antes del 31 de diciembre de 2023», matiza la edil. En esa fecha, los 149 municipios españoles de más de 50.000 habitantes deben tener ya una Zona de Bajas Emisiones (el ejemplo más conocido es ‘Madrid Central’).

«Hay que ir acostumbrándose a ello. Nuestro compromiso sigue estando en la reducción de las emisiones que provocan el cambio climático, y en el fomento de nuevas formas de movilidad, por eso tenemos que seguir trabajando», recuerda Pulido. Este ‘Cáceres Central’ aglutinará las calles ya restringidas al tráfico en los últimos años, formando un eje fácil de cubrirse a pie: la zona de los Obispos, Gómez Becerra y la veintena de vías cerradas el pasado año a raíz de la limitación de San Ildefonso (todo el itinerario de Santa Clara, Soledad, Gallegos, San Juan, Pizarro, Fuente Nueva y otras calles señeras del casco viejo). También el eje San Antón-Parras y Clavellinas (pendiente solo de la instalación de las cámaras, como el bloque anterior).

Carriles bici, parkings...

A ellas se unirá el calmado de tráfico en el tramo de Gloria Fuertes con la reducción a un solo carril desde la Fuente Luminosa a San Antón, y varias actuaciones en San Blas. De momento no está previsto, ni tampoco se espera, el cierre de otras avenidas de mayor tráfico. El proyecto de ‘Cáceres Central’ se completa por el momento con la creación de aparcamientos disuasorios en Nuevo Cáceres, Maltravieso, San Blas y Parque del Príncipe; y varios carriles bici (Cáceres-Capellanías, Cáceres-Casar de Cáceres, campus, ronda de la Pizarra y la Hispanidad).

 «Iremos sacando proyectos para establecer una zona donde claramente se reduzcan las emisiones y se fomenten los peatones y bicicletas», indica María José Pulido, que además se ha referido a la necesidad de impulsar estas adaptaciones no solo desde la gestión municipal. «Hay que cambiar los hábitos, también los ciudadanos deben ir planificando su vida de otra manera a la hora de moverse por el centro».

 Respecto al ‘Día Mundial sin Coches’, que tiene como fin concienciar sobre la eliminación de los combustibles fósiles en las ciudades antes del 2050, y avanzar en una logística urbana sin emisiones antes del 2030, «la jornada se desarrolló sin incidencias importantes, con los peatones invadiendo parte de la calzada y disfrutando de Cánovas sin ruidos, con un aire bastante más limpio», destaca la portavoz.

Cifras del bus

Las cifras más significativas pudieron medirse en el uso del bus urbano, gratis durante toda la jornada. En total se registraron 27.183 viajeros, una cifra que no se alcanza desde hace «bastante tiempo» en una sola jornada. Como ejemplo, el jueves anterior, 15 de septiembre, se contabilizaron 20.181 usuarios, y un día comparable antes de la pandemia, el jueves 19 de septiembre de 2019, hubo 19.553. «Debemos sentirnos orgullosos, porque mucha gente dejó el coche», apunta la edil.