El lío de tirar la basura en la parte antigua de Cáceres

"Se necesita un máster", dice una vecina del recinto intramuros, que reside en el barrio hace ocho años y que a partir de este domingo deberá adaptarse al periplo de tirar la basura. Ese día comenzará el servicio de recogida puerta a puerta, una medida con la que el Ayuntamiento de Cáceres pretender mejorar en reciclaje. Afecta a 3.000 vecinos y 40 hoteleros.

3.000 vecinos y 40 hosteleros de la parte antigua tendrán recogida de basura puerta a puerta

Las zonas

"Esto es un lío", añade la residente. Para hacer posible la iniciativa, el ayuntamiento ya ha repartido más de 3.000 cubos que permitirán eliminar los 95 contenedores que actualmente se encuentran situados en la zona del recinto de intramuros, San Juan, Plaza Mayor, Plaza de la Concepción, Santa Clara y la zona de Santiago. En caso de no acogerse a la medida, los afectados deberán acudir a su contenedor más cercano: los de la Concepción, por ejemplo, lo tendrán en Galarza.

El horario

Desde ayer y durante toda la jornada de este viernes se reparten las bolsas compostables a todos los vecinos que ya han recogido los cubos de basura. De esta forma los residentes y negocios de la zona deberán sacar sus cubos a la puerta entre las 20.00 y las 23.00 horas y será el servicio de recogida el que se encargue del vaciado.

Aquellas personas que todavía no hayan recogido su cubo pueden hacerlo de lunes a viernes de 10.00 a 14.00 y de 17.00 a 20.00 horas en el Edificio Valhondo.

Aprenderse el calendario

Para que los vecinos conozcan qué día deben sacar los diferentes tipos de residuos tienen a su disposición un calendario que viene indicado también en los cubos. Y ahí es donde se genera el problema: en aprenderse el calendario, que es el siguiente: los lunes se recogerán la basura orgánica y los envases, los martes el papel y cartón, los miércoles la orgánica, los envases y el vidrio, los jueves, el resto, los viernes, la orgánica, los sábados, los envases, y los domingos, la orgánica, el resto y otros.

Además, a diario se recogerán pañales, heces de animales, compresas y similares.

Seis contenedores

Para todo ello hay seis contenedores diferenciados por colores: marrón, azul, amarillo, verde, gris y granate.

En el marrón, destinado a la basura orgánica, se depositan los residuos biodegradables de cáscaras y pieles de frutas, restos de carnes, pescaos, verduras, posos del café, restos de infusiones, etcétera. También papeles y cartón manchados de grasa o aceite, y pequeños restos vegetales, tapones de corcho y serrín.

En el contenedor azul, para el papel y cartón, se pueden dejar el papel de impresión y escritura, catálogos, folletos publicitarios, periódicos, revistas, libros, cajas y embalajes de papel y cartón.

En el amarillo, el de los envases, se pueden almacenar envases y botellas de plástico, briks, latas y aerosoles, plástico, film, papel de aluminio, bolsas de plástico, tapones, tapas y chapas metálicas de envases de vidrio, porexpan o corcho blanco, envoltorios de burbujas y redes de plástico de frutas y verduras.

En el verde, de vidrio, se tiran las botellas, los botes, tarros y frascos.

El gris, el denominado resto, sirve para dejar residuos que no tengan un sistema específico de recogida en el municipio, pañales y heces de animales, vajilla o cubiertos, juguetes y cristales rotos, objetos de plástico o metal que sean envases y cenizas apagadas.

Y, por último, el granate sirve para dejar enseres, electrodomésticos, podas, pilas, aceite y ropa.

"Será cuestión de acostumbrarse", apunta la vecina tras leer el calendario y pegarlo en su nevera. Ahora toca memorizar.