Cáceres arranca su preferia

Un ejército de camiones descargaba en torno al mediodía los últimos materiales y víveres para tener todo a punto. La preferia arrancó este viernes con el primero de los días con precios especiales, dirigidos, sobre todo, a los más pequeños. Así, los padres pueden ahorrarse unos euros mientras sus pequeños se montan en los coches de choque, los caballitos o montañas rusas. El parpadeo de las luces de neón, un delicioso aroma a churros, patatas fritas y algodón de azúcar ha vuelto de nuevo a Cáceres. Esa radiografía tan característica, formada por el bullicio de las personas al montarse en las atracciones y el de los feriantes que anuncian sus productos.

Unos muchachos caminan de la mano de sus progenitores y serpentean las calles de la feria en busca de sus cacharritos favoritos. Otros esperan con sus abuelos delante de una tómbola, boquiabiertos ante tal cantidad de peluches de varias temáticas. Otros, algo más mayores, ya aguardan en la cola a subir a las atracciones más imponentes y curiosas.

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Jesús Bares, veterano feriante del popular ‘Canguro loco’, indica a El Periódico Extremadura que «esperamos que los cacereños tengan ganas de pasárselo bien y disfrutar. Solo pedimos buen tiempo». Aunque también se queja de la subida general de los gastos a causa de la inflación. «Todo ha subido en este país, la electricidad, el combustible; por eso hemos tenido que subir inevitablemente los precios», comenta Jesús Bares. No obstante, los feriantes han acordado reducir al 50% los precios de las atracciones durante los dos Días del Niño. Cada tickets cuesta cuatro euros.

«Aprovechamos a venir los días con tarifa reducida porque, al tener tres hijos, la diferencia respecto a un día sin rebaja es considerable», apunta Laura Gómez desde uno de los castillos hinchables. Se encuentra con su marido y otra pareja de amigos.

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«¡Ha estado muy divertido!», «Mirad, me tiemblan las piernas» o «Si nos da tiempo, luego volvemos a montarnos de nuevo», son algunos de los comentarios que se pueden escuchar de distintos grupos de jóvenes que buscaban más cacharritos en los que gastar su dinero (‘Barco Vikingo’, ‘Big flight’, una noria adaptada para minusválidos...). Se cuentan por cientos las personas que acudieron al recinto ferial cacereño en un abarrotado primer Día del Niño, que supuso el mejor colofón de salida posible a la semana grande de la Feria de San Fernando.

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