ORIUNDO DE CAÑAVERAL

Jesús Redondo Bermejo, el nuevo abuelo de Extremadura con 107 años

Vive en la residencia ‘El Cuartillo’ y goza de buena salud, «sin prisas y disfrutando de la vida». Tras el fallecimiento del ‘tío Felipe’ de Calzadilla, es el más longevo de la región

Jesús Redondo Bermejo, el nuevo abuelo de Extremadura, tiene 107 años.

Jesús Redondo Bermejo, el nuevo abuelo de Extremadura, tiene 107 años. / EL PERIÓDICO

Eduardo Villanueva

Eduardo Villanueva

El nuevo abuelo de Extremadura es natural de Cañaveral, tiene 107 años (y apenas le quedan tres meses para cumplir los 108, ya que nació el 2 de junio de 1915), vive en la residencia ‘El Cuartillo’ de Cáceres y goza de buena salud. Tanto es así, que «con su bastón se paseaba todos los días a por su periódico; vive tranquilo, sin prisas y disfrutando de la vida. Un hombre trabajador y honesto, que sigue en sus plenas facultades», explica a la página Extremeños Centenarios la directora del centro.

Este honorable título le ha llegado a Jesús Redondo Bermejo (que es el décimo cuarto hombre más anciano de España) tras el fallecimiento el pasado 8 de marzo de Felipe Sánchez Acosta, de 108 años. El ‘tío Felipe’ de Calzadilla no tomaba pastillas pero sí una copa de vino diaria.

José Iglesias Rubio, Montehermoso, acaba de cumplir 106 años.

José Iglesias Rubio, Montehermoso, acaba de cumplir 106 años. / CEDIDA

Los hombres más ancianos de la provincia

Además, esta semana cumplió años uno de los varones más ancianos de Extremadura, concretamente el cuarto más longevo: José Iglesias Rubio, nacido en Montehermoso el 17 de marzo de 1917. Vive actualmente en la residencia de su localidad natal, donde ha celebrado sus 106 años

Otro centenario legendario de la provincia de Cáceres es el ‘tío Castor’, nacido en Roturas de Cabaña el 15 de febrero de 1919, donde aun reside y que hace apenas un mes alcanzó los 104 años. Que se une a Dionisio Iglesia Palomino, que en febrero también ha cumplido años: 101. Nacido en Zarza la Mayor el 8 de febrero de 1922, vive actualmente con su hija en Moraleja.

El ‘tío Castor’, Roturas de Cabañas, 104 velas.

El ‘tío Castor’, Roturas de Cabañas, 104 velas. / CEDIDA

Dionisio Iglesias, de Zarza la Mayor, cumplió 101 en febrero.

Dionisio Iglesia, de Zarza la Mayor, cumplió 101 en febrero. / CEDIDA

La incombustible Silveria

La mujer (y la persona) más longeva de Extremadura (y casi de España) sigue siendo la incombustible Silveria Martín Díaz, que nació el 20 de junio de 1910 en Talavera la Vieja, la antigua ciudad de Augustóbriga, que desde 1963 permanece sumergida bajo las aguas del embalse de Valdecañas. Vio desaparecer su pueblo natal y tuvo que reinventar su vida y la de su familia. Avatares que no han evitado que esta extremeña haya llegado a cumplir la friolera de 112 años, sin perder la ilusión de vivir. Es residente en un centro de Villanueva de la Vera, se convirtió el año pasado en la persona más longeva de Extremadura (y la tercera de España).

Hasta el pasado 19 de julio de 2021, ese honor recaía en Inocencia Zofio Cajal, nacida el 1 de mayo de 1910 en la localidad de Valencia de Alcántara, que falleció en Cáceres en junio de 2021, a los 111 años y 79 días. Ostentaba el título extremeño a la persona más anciana desde el 22 de diciembre de 2019.

Fue entonces cuando Silveria le tomó el testigo. Nació y continúa viviendo en Extremadura; en su provincia de Cáceres. Algunos de sus recuerdos han quedado sumergidos como el pueblo donde vino al mundo: Talavera la Vieja.

Cuando su localidad natal quedó anegada, ella ya contaba con 53 años; fue entonces cuando se completó el éxodo de los talaverinos, debido a que el gobierno franquista (con su agresiva política hidráulica) decretó el desalojo, pese a que la primera ubicación del pantano salvaba el municipio, porque se construiría por encima del mismo. Pero quedaba el peligro de una posible rotura; así que el destino ya estaba escrito. Se casó con el tío José «El Retratista» (como le conocían sus vecinos), nacieron sus cinco hijos y vivieron hasta que cumplió los 53 años y llegó la citada orden de desalojo del pueblo; por lo que la familia tuvo que rehacer su vida en otro lugar.