Apenas fueron dos minutos, 120 segundos que Ismael Hernáez Vizcaíno, Isma Hernáez (Móstoles, 7 de abril de 2000), guardará para siempre en su retina. El motivo, se estrenó con el Cacereño, siendo el primer jugador del filial verde que debuta esta temporada con el primer equipo. 

«Estoy muy, muy emocionado, es algo que no se puede explicar», cuenta el protagonista, al que se le hicieron eternos los dos minutos que estuvo esperando en la banda, junto a la línea del centro del campo, a que su cambio pudiera realizarse. En esos 120 segundos, más o menos, le pidió al árbitro asistente que no pitaran el final (el encuentro ante el Ceuta estaba ya en el tiempo de prolongación), que iba a debutar. «Tranquilo, que te dejaremos algo», le dijo el linier. 

Y se lo dejaron. Entró por Solano, cumpliendo así un sueño de niño. «Siempre he querido ser futbolista y cuanto te dan una oportunidad, aunque sea pequeña, emociona».

Isma Hernáez, junto a Julio Cobos, antes de saltar al terreno de juego. JOSE PEDRO JIMENEZ

Isma Hernáez, delantero que ha marcado seis goles esta temporada con el filial de Segunda Extremeña (empezó a jugar con la campaña ya iniciada), lleva mes y medio en la dinámica del primer equipo y la del partido ante el Ceuta era su tercera convocatoria seguida. Estuvo en el banquillo en el «partido épico» ante Las Palmas Atlético y después en el desplazamiento a las Islas Canarias para jugar ante el Panadería Pulido. «Viajar con el equipo, estar con ellos en la convocatoria, fue algo muy especial», rememora este futbolista que vive en Torreorgaz desde que tenía cuatro años y que además del fútbol está preparando las oposiciones para Policía Nacional.

Un amplio currículum

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Se define como un «hombre de área» al que le gusta que le lleguen balones para rematarlos de cabeza. A pesar de contar solo 21 años, su currículum deportivo es ya extenso. Comenzó en el club de Torreorgaz, de donde han salido también Rai y Juanjo Chavalés, ambos ahora en el Coria (uno como entrenador, el otro de jugador), y después pasó al Diocesano, donde siendo juvenil de primer año hizo una buena temporada en División de Honor («marqué muchos goles»). Llamó la atención del Girona, que se lo quiso llevar en diciembre, aunque no pudo. Sí salió rumbo a tierras catalanas en verano. Allí hizo su segundo año de juvenil. Volvió para jugar en Badajoz y después, la temporada pasada, en Miajadas. Ahora está en el Cacereño B, «donde hay un grupo de gente muy ilusionada con el fútbol». 

«Yo sigo con la cabeza en el filial», cuenta con humildad, «voy a seguir igual, pero el gusanillo de estar con el primer equipo está muy bien», relata Isma Hernáez, que confiesa haber aprendido mucho en el último mes y medio a las órdenes de Julio Cobos. Este domingo trasladará todo lo aprendido al Cacereño B (el primer equipo descansa), que se enfrenta en Pinilla al Jerte (12.00 horas). «Estoy centrado en luchar para ascender al equipo», concluye este delantero que, curiosamente, comenzó su vida en el fútbol siendo portero. La vida de área a área.