Real Madrid

La semana negra del madridismo: un año sin Courtois, sin Militao... y sin Mbappé

El Real Madrid ya trabaja en paliar las dos graves lesiones de sus pilares defensivos: llegará Kepa cedido y se peina el mercado de centrales

Éder Militao se retira lesionado de San Mamés, ayudado por los médicos del Real Madrid.

Éder Militao se retira lesionado de San Mamés, ayudado por los médicos del Real Madrid. / AFP

Sergio R. Viñas

El madridista medio encaraba hace unos días el arranque de LaLiga con la ilusión de contar con una plantilla amplísima y de gran calidad, apuntalada por el exuberante Jude Bellingham y solo a la espera de que Kylian Mbappé sirviese de guinda para paliar (y de qué manera) la marcha de Karim Benzema como referente goleador. Buenos tiempos aquellos de ilusión, antes también de que Courtois y Militao se lesionaran y de que se confirmara el paso por el quirófano de Arda Güler.

Cuatro días han bastado para que la sonrisa haya mutado en mueca. Sí, por el camino el equipo de Carlo Ancelotti ha firmado un solvente estreno liguero en San Mamés (0-2), en el que además Bellingham ha confirmado su potencial para convertirse en la próxima gran estrella del madridismo. Pero los estímulos negativos han derrotado a los positivos.

La lesión de Courtois

Todo empezó el jueves, cuando se conoció la grave lesión de Thibaut Courtois. Fue además un golpe seco, sin previo aviso. Apenas pasaron unos minutos desde que se filtró que algo había ido mal en el entrenamiento de la mañana hasta que el club publicó en el comunicado oficial con las malas noticias: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda.

El Real Madrid ni siquiera se dio tiempo para sumirse en el duelo. El deber del club era buscar un sustituto de emergencia, dada la escasa seguridad que transmite Andriy Lunin (especialmente al propio Ancelotti) y a la falta de nivel y experiencia de los guardametas del Castilla. Carletto sugirió el nombre de Yassine Bono, pero la operación fue rápidamente descartada por la disputa de la Copa África en enero y por su coste.

Sobre la mesa también estuvo el nombre de David de Gea, pero el elegido acabó siendo Kepa Arrizabalaga. Una cesión por parte del Chelsea por la que el club blanco pagará alrededor de cinco millones de euros, además de asumir el salario del futbolista. El Bayern, que también le pretendía, confirmó ayer un fichaje todavía no anunciado por el Madrid (algo que previsiblemente ocurrirá este lunes). "Estábamos cerca y de hecho queríamos presentar a Kepa hoy. Pero es español y eligió al Real Madrid", explicó ayer el director general de los bávaros, Jan-Christian Dreesen.

Militao se lesionó en San Mamés

Algo más de tiempo se tomará el Real Madrid para decidir qué hace con el centro de la defensa. Éder Militao, durante la visita a San Mamés, sufrió exactamente la misma lesión que Courtois: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. El diagnóstico gozó de mayor intriga, pues hubo que esperar al mediodía del domingo para confirmarlo, pero el resultado es el mismo, una temporada en blanco (o casi) para ambos.

La presencia en la plantilla de David Alaba, Nacho Fernández y Antonio Rüdiger ofrece mayor margen de maniobra a un Madrid que no descarta la opción de no reemplazar a Militao. El mercado de jugadores libres no ofrece nombres de nivel (a excepción de un Sergio Ramos cuyo posible regreso parece imposible) y la solución podría pasar por buscar alguna cesión convincente. Pero no parece fácil.

Repescar a Rafa Marín (Alavés) o Jesús Vallejo (Granada) de sus cesiones es otra de las opciones. O, directamente, sumergirse en el mercado y fichar a un futbolista de presente y futuro, pensando en que el propio Militao es el único central de la plantilla que se encuentra por debajo de la treintena.

El PSG indulta a Mbappé

Y contando, además, con que este verano el Real Madrid no tiene que reservar dinero para afrontar el fichaje de Mbappé. Algo que en el club tenían bastante claro, aunque dejando la puerta abierta a que el propio jugador propiciara un escenario diferente, pero que la afición blanca empezó a asumir a partir de este domingo, cuando el PSG indultó al delantero y le permitió volver a entrenar a las órdenes de Luis Enrique.

Con estos son ya tres veranos consecutivos en los que el Real Madrid y Mbappé coquetean sin que nada cambie: en 2021, el PSG rechazó dos descomunales ofertas el último día del mercado; en 2022, el francés rompió el preacuerdo para mudarse al Bernabéu con la carta de libertad; y ahora no ha dado el paso decisivo que esperaba, sin prisa alguna, Florentino Pérez para activar la operación.

Kylian Mbappé y Ousmane Dembélé, en el palco del Parque de los Príncipes durante el PSG-Lorient.

Kylian Mbappé y Ousmane Dembélé, en el palco del Parque de los Príncipes durante el PSG-Lorient. / EUROPA PRESS

En las oficinas del Bernabéu, en realidad, las miras siempre han estado puestas en el verano que viene. Y según cuentan desde Francia, el PSG y Mbappé están acercando posturas para firmar una renovación que incluya una cláusula de salida prefijada para dentro de 12 meses. Porque el verano que viene, sí o sí, el ya eterno culebrón Mbappé volverá a reabrirse. Para ilusión de muchos y pereza de otros muchos.

El Real Madrid se planta así, a mediados de agosto, sin el portero y el delantero titulares de las últimas temporadas y sin su defensor más fiable del último curso. Un jarro de agua fría para el madridismo y un nuevo reto para Ancelotti. Claro que todo eso huele a caldo de cultivo para nuevas e inexploradas gestas. La historia así lo dicta.