«Es una oportunidad histórica que hay que aprovechar en Extremadura»

¿Por qué apoyan desde Extremadura New Energies el centenario de El Periódico Extremadura?

Extremadura New Energies es una empresa 100% extremeña y 100% cacereña, con vocación de permanencia, y creemos que es importante apoyar a periódicos de la ciudad, como es El Periódico Extremadura, en una fecha tan señalada como esta. ¡Ojalá podamos celebrar juntos los 150 y los 200 años de este periódico! 

Ante la actual situación de emergencia climática, ¿cómo afectan los combustibles fósiles y por qué es importante otras soluciones como el litio?

Por el bien del planeta es imprescindible impulsar alternativas a los combustibles fósiles, y hacerlo ya, porque todos los expertos dicen que vamos muy tarde. En el caso del litio, será clave en las próximas décadas por su papel protagonista tanto en la movilidad eléctrica como en el desarrollo de soluciones de almacenamiento en plantas de energías renovables.

Esa transición energética es mirada con recelo, ¿cómo se puede hacer de forma responsable?

En Europa tenemos que ser valientes y tenemos que dar un paso al frente y hacernos responsables de una parte de esa transición si queremos que se haga en las mejores condiciones posibles. No podemos dejarlo todo en manos de terceros países en los que en muchas ocasiones los proyectos se desarrollan en condiciones que aquí no aceptaríamos.

¿Qué hace de Extremadura una región en la que el proyecto de la mina saldría rentable?

La clave está en que en Cáceres tenemos uno de los mayores yacimientos de litio de toda Europa. Y hay mucha gente y muchas empresas trabajando para garantizar que se ponga en marcha en la región toda la cadena de valor del litio, asociada a una nueva industrialización. Es una oportunidad histórica que tenemos que aprovechar en Extremadura.

¿En qué puede beneficiar al país y a Extremadura que las materias primas se puedan extraer en la región?

Como le decía, la clave pasa por que aquí no solo se va a extraer el litio, sino que el hecho de tener aquí ese mineral clave hace que se vaya a procesar en Cáceres. Proyectos como el de Extremadura New Energies sitúan a la región en el mapa europeo de la transición energética y en el corazón de ese nuevo ecosistema industrial que se está creando en torno al litio.

¿De qué forma estudia el proyecto garantizar la seguridad y la salud de las personas, la protección de la fauna…?

Hemos trabajado muy duro para diseñar un proyecto que cumple con los máximos estándares de sostenibilidad medioambiental y que aspira a ser ‘0 emisiones’ y ‘0 vertidos’. No es casual que Europa lo estudie como un modelo de proyecto energético ‘verde’.

¿Confía en que es posible aplicar un modelo de transición que sea justo para el medio ambiente, el entorno y las personas trabajadoras?

No solo es posible, sino que es imprescindible. Nuestro proyecto cumple todas esas condiciones; estamos en Europa en pleno siglo XXI y el desarrollo industrial no se puede entender de otra manera.  

¿Cómo explicaría las garantías medioambientales del proyecto?

Hemos diseñado un proyecto con una extracción 100% subterránea, con uso de maquinaria eléctrica, alimentado por hidrógeno verde y energía solar, que usa aguas residuales en circuito cerrado… Este proyecto incorpora todas las mejoras de sostenibilidad medioambiental que están disponibles técnicamente en la actualidad.

¿En qué consiste el proceso en que han colaborado con InnoEnergy para evitar el uso de ácido sulfúrico en la transformación de litio en hidróxido de litio?

Es un proceso pionero que es posible por las características únicas de este yacimiento, es decir, por la forma en que se puede extraer el litio de la roca. Además, es un proceso que se alimentará de hidrógeno verde y seguimos trabajando para mejorarlo aún más.

Para Extremadura, ¿qué supondría a otros niveles, más allá del medioambiental: empleo, aprovechamiento de recursos...?

Durante los dos años de construcción se crearán 1.500 empleos directos y, durante la fase de operación, serán 700 empleos directos. Además, habrá un retorno fiscal de al menos 2.400 millones de euros, de los que 1.200 millones se quedarán en la región, con una media de 42,8 millones de euros al año.