La alcaldesa, Elena Nevado, aseguró ayer que el remanente negativo de tesorería para gastos generales del ayuntamiento, que al cierre del año 2012 era de 15,5 millones de euros, "es el primer problema que nos ocupa". El dato del déficit de tesorería es una de las magnitudes que aparecen en la liquidación presupuestaria del 2012, que Nevado aprobó el 8 de abril y de la que ayer se dio conocimiento al pleno de la corporación del ayuntamiento.

La Ley de Haciendas Locales establece que en el caso de que el remanente de tesorería para los gastos generales sea negativo se deben adoptar medidas correctoras. Da tres posibilidades. La primera es que el pleno reduzca los gastos del presupuesto en vigor en 15,5 millones de euros. Ayer no se acordó nada al respecto, el remanente solo se citó en 3 ocasiones. La reducción de esta cantidad supondría un recorte superior al 20% de los presupuestos.

La segunda es la contratación de una operación de crédito por valor de 15,5 millones de euros, pero el ayuntamiento podría no cumplir con los límites que se fijan en la ley para esta posibilidad dado su actual volumen de deuda por créditos (a finales de 2012 superaba los 25 millones).

Aunque la deuda del ayuntamiento con bancos y entidades de crédito se haya reducido, en el año 2012 no se contrató ninguna operación, no será hasta el 2015 cuando se liquiden la mayoría de los créditos en vigor.

La tercera opción es que en el presupuesto de 2014 se presupuesten unos ingresos superiores en 15,5 millones a los gastos. Esta es la opción por la que se ha optado en ejercicios anterior, dado que el remanente negativo se viene repitiendo en los últimos años (las liquidaciones de los últimos nueve años se han cerrado con remanente negativo).

Hay una cuarta vía, la elaboración de un plan de saneamiento financiero, que es la que el consistorio usó para cuadrar los presupuestos de este año (debido a que en caso contrario los ingresos tendrían que haber sido superiores en 14 millones de euros a los gastos). No obstante, este plan aún no se ha presentado.

En el pleno celebrado ayer no se habló de cómo se corregirá el déficit de tesorería. La alcaldesa mencionó el remanente de tesorería negativo en tres ocasiones. La primera para responder a una propuesta que hizo el grupo socialista para sufragar un plan local de empleo. La segunda, también en una contestación al grupo socialista, cuando por la oposición se hizo una propuesta para financiar obras en el barrio de Llopis Ivorra. Y la tercera a una pregunta hecha por la concejala no adscrita, Marcelina Elviro, que en su intervención recordó que el remanente negativo fue inferior en años anteriores y que los dos déficit de mayor cuantía se han producido al cierre de los años 2011 y 2012.

En todas sus intervenciones, Nevado achacó el déficit de tesorería a la herencia recibida. En la última aseguró que en el resultado ajustado del presupuesto de 2012 (el cumplimiento de las previsiones, con los derechos y obligaciones reconocidas, de los presupuestos de 2012 y los ajustes) se había conseguido un balance positivo de 3,4 millones de euros, añadiendo a continuación que el déficit de tesorería se debe a que "se arrastra un remanente de tesorería negativo de muchos años" porque se presupuestaban "unos ingresos que eran ficticios" y se asumían compromisos de gastos sin retención del crédito necesario.

En la liquidación del presupuesto del 2012, que es una foto fija a fecha de 31 de diciembre con el resultado del año más lo que viene de ejercicios anteriores, se cuantifica en 31 millones la deuda (obligaciones pendientes de pago). Una parte importante de este débito solo se explica por la deuda con empresas concesionarias de servicios o por sentencias judiciales, dado que la mayor parte de la deuda con proveedores anterior a 2012 se atendió con el plan de pago abonado en agosto.