Los vecinos denuncian desde hace meses la presencia de inquilinos ilegales en los inmuebles abandonados

Incendio en una casa okupa de Cáceres: “Tarde o temprano tenía que ocurrir”

Es el segundo incidente en el bloque en menos de un mes. No había nadie en el interior cuando llegaron policía y bomberos. Sí provocó un intenso humo y alarma entre los números colindantes

Los bomberos, en la casa okupa de Margallo, este miércoles.

Los bomberos, en la casa okupa de Margallo, este miércoles. / G. G.

Un incendio en la casa okupa de Margallo de Cáceres ha provocado la alarma entre los vecinos este miércoles. El fuego se ha iniciado pasadas las 17 horas en el interior del edificio sobre el que pesan ya numerosas quejas por la presencia de inquilinos ilegales desde hace meses.

Han sido los propios vecinos los que han dado el aviso a los bomberos después de que se produjera un intensa humareda en las traseras de la calle. Las patrullas de policía local, los primeros en llegar hasta el lugar del suceso, pudieron comprobar que no había nadie en el interior del inmueble.

Hasta dos dotaciones de bomberos se han desplazado para sofocar las llamas. En cuanto al origen del fuego, se ha descartado que haya podido deberse a algún aparato eléctrico puesto que el edificio no tiene suministros ni de luz ni de agua. Barajan como opción que haya podido ser o bien un pequeño electrodoméstico que no necesita conexión eléctrica o simplemente una pequeña fogata descontrolada.

Mientras el equipo del Sepei se empleaba para detener el fuego, vecinos y curiosos han rodeado el inmueble. El incidente, el segundo en menos de un mes, acrecenta la inquietud de los vecinos de los bloques aledaños, que no se han mostrado sorprendidos ante lo ocurrido. "Tarde o temprano tenía que ocurrir". Sí destacan que el suceso de hace semanas, se quedaron sin agua después de que rompieran una tubería, nada tiene que ver con el que ha acontecido hoy y piden al ayuntamiento una actuación urgente al respecto.

El propio ayuntamiento ya anunció el aumento de la vigilancia en la zona después de que los residentes hiciera públicas sus quejas por las molestias que provocaban los okupas.