Una esquila para el futuro

En la cueva de Maltravieso se encuentra la cuna de la humanidad. Cáceres ha conservado sus restos durante décadas para que no se pierda su memoria. El Museo de Cáceres que gestiona la Junta de Extremadura es uno de los mayores conservadores de la historia de la ciudad y en ese afán de mantenerla viva, este martes hizo una demostración para los escolares de la ciudad, para el futuro.

Fue, precisamente, en la explanada de la gruta prehistórica donde los más jóvenes se concentraron durante la mañana para ser testigos de uno de los oficios más antiguos y artesanos: la esquila de las ovejas. Un grupo de expertos esquiladores mostraron por turnos a los alumnos de los colegios cómo se extrae la lana de las ovejas, en este caso de raza merina, de la forma más eficiente para que ese material luego se pueda usar en la moda.

Una esquila para el futuro

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La actividad que ya se ha celebrado en más ocasiones en Extremadura estuvo organizada por el departamento de Educación del Museo de Cáceres en colaboración con la cooperativa Actyva y la asociación Laneras y tiene como objetivo concienciar sobre el valor del oficio y la importancia de la raza merina.

Cada turno estuvo abierto al público general y contó con una sesión en vivo de esquila a máquina y manual. A lo largo de toda la sesión, los expertos realizaron a los presentes una clasificación de vellones y pusieron de relieve el valor del ganado ovino y de la raza merina en nuestra historia y en el presente de la región, así como, los beneficios medioambientales y sociales que conlleva la recuperación de costumbres y saberes ancestrales relacionados con la ganadería extensiva y el aprovechamiento sus recursos.

Más tarde, y ya en una actividad exclusivamente dirigida a los estudiantes de quinto de Primaria de los colegios, los especialistas detallaron el proceso de hilado de la lana y concluyeron un taller colaborativo en el que los alumnos pudieron crear sus propios complementos de lana mediante la técnica del fieltro húmedo. n