Así viven el festejo los hurdanos

El carnaval jurdanu, tradición y misterio en la pedanía de Cambrón

La fiesta de Interés Turístico Regional celebra una nueva edición ante cientos de personas 

Un sin fin de personajes místicos y carnavalescos recorren las calles de la alquería de Las Hurdes al son de los tamborileros 

VÍDEO | El carnval jurdano, tradición y misterio en la pedanía de Cambrón

JORGE ARMESTAR

El 'Entruejus’ como denominaban los ancestros hurdanos y popularmente conocido como ‘Carnaval Jurdano’ tuvo lugar el ‘sábadu gordu’ 10 de febrero en Cambrón, alquería del municipio de Caminomorisco. Celebración de arraigo costumbrista y mística que cada año recorre las calles llenas de arquitectura vernácula de piedra y pizarra de una de sus entidades menores, de los seis grandes concejos que envuelven la comarca.

Dulce inicio tuvo la inauguración de la festividad ancestral, que comenzó sobre las once de la mañana con la degustación de los típicos manjares azucarados de la comarca con su pertinente café y aguardiente. Acompasados por la música de la tradicional gaita y el ritmo del característico tamboril de los músicos de la Corrobra Estampas Jurdanas y la Escuela Provincial.

Tras la cata, surgió la búsqueda de ‘El Pidiol’ personaje que encarna a un pobre mendigo, al que se pretende nombrar como Rey de El Carnaval o Rey de loh Entruéjuh, en lengua hurdana. Un cargo entregado cada año por petición popular a un vecino de la pedanía, donde se celebra el mítico carnaval. En esta edición, Teófilo García Hernández, popularmente conocido como Piché, tendrá esta responsabilidad que deberá guardar hasta la próxima festividad. Un monarca al que se le cantó las coplas de la antigua ‘Arborá’, entonados por las ‘Mozas del Guinardu’ y el resto de la corrobra.

‘El Pidiol’ recorrió la calle principal de Cambrón a lomos de un burro. Un desfile al que se sumaron los variopintos y diferentes personajes del ‘Carnaval Jurdano’, ajenos a toda formación con sus danzares y rituales animaron la marcha.

Antes de pasar al tradicional festín, se homenajeó a Florentino Velaz Domínguez, el primer periodista de la comarca, por su gran labor radiofónica en RNE. Los reconocimientos continuaron, en este caso, a Flora Martín Montero y Teófilo García Hernández, vecinos de Cambrón, por su contribución y puesta en valor del folclore hurdano.

Concluidos los discursos en alabanzas a los vecinos que durante años divulgaron y representaron la tradición hurdana. Se dió paso a la comida como buena tradición rural que nunca puede faltar, en este caso las alubias como plato principal para todos los curiosos que se acerquen a ver esta tradición, sin importar si eres hurdano o no. Un banquete donde los asistentes comieron y bebieron hasta ‘jinchapelleju’, una expresión popular en la zona que expresa ‘hasta llenarse’.

Tras la digestión de los alimentos, comenzaron los diferentes ‘rejuíjus’ o representaciones de los diferentes personajes mitológicos que envuelven este carnaval: Osa del Cabezu; Jilandera y el Arcadio Mozu; Toru Bardinu, La Mondonguera y el Toreal; La Madredama y los Quintuh Fanfarrónih; el parto de la Tía Rechoncha; el bautizo del Niñu Jurdanu a cargo del Obíhpu de Lah Júrdih; Loh Araórih del Rozu; la Vaca Cachana que amamantó a los siete Jáncanus.

A estas representaciones se le suma la aparición de ancestrales personajes: el Machú Lanú, el Pelujáncanu, el Duende Entignau, Loh Diabrílluh y sin fin de personajes que componen esta festividad.

La tradición prosiguió con los danzares y los choques de los palos del baile tradicional hurdano ,“El Paleo”, a cargo de la Escuela Municipal de Caminomorisco.

La copla

Cantares al Rey del Carnaval en lengua hurdana

‘Si te portas bien,

te habemus de dal

calostrus de cabra

hasta revental.

Si te portas mal,

te habemus de dal

una gran calienta,

que fríu no tendrás.

Te lo decimus, güen rey,

pa que lo tengas en cuenta,

que cudies bien a Las Jurdis,

coumu si fuera una reina’.

Representaciones que dieron paso a El Pidiol, que vuelve al escenario para recibir sus indumentarias reales rodeado por su pintoresco séquito. El nuevo monarca recogió sus inigualables atributos concedidos por el emérito: corona, capa, gran collar de ajos y el cetro, mientras que, se dirigió al pueblo hurdano y se leyó el Pregón del Entrueju. En esta edición no se representó la típica sucesión, en la cual, el rey entrante monta en el burro del derecho y el saliente al revés, para enmarcar el nuevo reinado que durará hasta el próximo carnaval.

La coronación pasó a la ‘Pruseción de El Morcillu’, un pelele, mitad varón y mitad macho cabrío que fue arrastrado, golpeado, ahorcado y quemado por incitar al adulterio. Las mujeres, las cuales adoran a este ser, le cantan coplas que los hombres responden con cánticos y golpes al muñeco.

Antes de la despedida, se pasó a la cena de la parrillada de presas de lechón acompañada de la apropiada patata asada.

Vídeo | Así se vive el carnaval jurdanu

VÍDEO: EL PERIÓDICO | FOTO: JORGE ARMESTAR

La historia de la tradición

Festejo de larga tradición, aunque no fue hasta 1991 cuando los alcaldes de la comarca de Las Hurdes llegaron a un acuerdo con ‘La Corrobra Estampas Jurdanas’ para el resurgir de las cenizas.

Bases y personajes que vienen de una longeva tradición, que tuvo que ser rescatada de la memoria colectiva de los veteranos de las distintas localidades de la comarca. Gracias a la transmisión de las viejas creencias y lo que algunos llamaban ‘rejuijus’ (representaciones al aire libre de los rituales y representaciones envueltas en el carnaval Jurdano). Historias populares que tras el hilo de los participantes de ‘La Estampas Jurdanas’ dio origen a través de los ancestros los que es el genuino carnaval actual.

Creación que no solo está enmarcada en las declaraciones recogidas por la carroba, también en antiguos textos que recopilan pasajes de la fiesta. Es el caso del manuscrito de Tomás Gómez Bernal, antiguo secretario del ayuntamiento de Caminomorisco y de la villa de Casar de Palomero a comienzos del siglo XX. Un libreto que se halló tras los escombros de una casa de Cambroncino, localidad vecina de Cambrón y pedanía de Caminomorisco, donde se encontraban archivos de la sociedad ‘La Esperanza de Las Hurdes’ de 1903-1908.

De aquellos polvos vienen estos lodos, en el buen sentido del refrán, que convirtieron este carnaval en Fiesta de Interés Turístico Regional en septiembre de 2017, posterior a la celebración que se produjo en Azabal ese mismo año. Festividad que quiere el sello de nacional dado el amplio valor que se le da incluso fuera de las fronteras nacionales, dado que como dicta el antropólogo Barroso “este año vinieron medios de Finlandia para captar esta tradición”.