En los próximos años

El Banco de España alerta sobre el impacto del cambio climático en el turismo español

El supervisor bancario constata ya un cambio de patrón con un alza de las llegadas de extranjeros entre el 10% y el 25% en los meses de otoño e invierno frente al 1% en lo de verano

Turistas pasean por la Plaza de España. A 10 de mayo de 2024, en Sevilla (Andalucía, España).

Turistas pasean por la Plaza de España. A 10 de mayo de 2024, en Sevilla (Andalucía, España). / María José López - Europa Press

Sara Ledo

Sara Ledo

En julio de 2023, la Comisión Europea publicó un estudio que sitúa algunas zonas de España entre las regiones europeas donde el turismo es más vulnerable al cambio climático. Desde el sector se descartó que se fueran a producir fugas masivas por la subida de las temperaturas. Pero ahora es el Banco de España quien pide "no minusvalorar" esta cuestión y alerta del impacto negativo que puede producir el cambio climático en España.

"Es importante resaltar que nuestro país está particularmente expuesto a los riesgos físicos asociados al cambio climático, por lo que el impacto del calentamiento global sobre la actividad turística podría incidir de manera más adversa de lo observado en los últimos años", afirma el estudio 'La reciente diversificación de los flujos turísticos internacionales hacia España', publicado este miércoles por el supervisor bancario.

Y de hecho el análisis constata ya un cambio de patrón en la última parte de 2023 y los primeros meses de 2024 que, precisamente, atribuye al cambio climático y a la inestabilidad en Oriente Próximo. Por ahora las consecuencias son positivas, al derivar en un modelo más desestacionalizado (visitantes más allá de la temporada alta), diversificado (no solo dirigido a 'sol y playa') y rentable (más gasto en vez de más turistas).

Más desestacionalizado y diversificado

Antes de la pandemia, el turismo internacional se caracterizaba por una gran concentración temporal y geográfica. Los turistas venían fundamentalmente en los meses de verano y el 80% lo hacía a Canarias, Baleares, Catalunya y Andalucía. Pero en los últimos meses parece haber habido un cambio con un mayor crecimiento de las visitas en los meses de otoño e invierno y en las regiones del norte del país.

Por un lado, según el estudio elaborado por Blanca Jiménez García y Coral García Esteban, en octubre, noviembre y diciembre se produjo un incremento de turistas del 10%, 16% y 25%, frente a los mismos meses del periodo 2016-2019, y en el primer trimestre de 2024 se elevó al 22%, respecto al mismo plazo. Mientras, en los meses de verano, el alza se limitó al 1%.

Por otro lado, según el documento del máximo organismo bancario, el número de pernoctaciones hoteleras de extranjeros en las regiones del Cantábrico, Navarra y La Rioja se incrementaron más de un 26% en 2023 frente al período previo a la pandemia; y en Canarias, Baleares y Andalucía se debilitaron ligeramente (–0,5%, –0,1%, y –0,2%, respectivamente).

Más rentable

Pero no solo eso. También el origen de los turistas extranjeros se ha empezado a diversificar, según afirman. Hasta ahora, los visitantes procedían fundamentalmente de Reino Unido, Francia o Alemania. Pero en 2023 se ha producido un crecimiento superior al 40% con respecto al período 2016-2019 de los turistas de Estados Unidos, mientras los países emisores tradicionales habrían mostrado crecimientos más moderados —como Francia, con un 5%, o Italia, con un 14%— e incluso retrocesos —como Alemania o Reino Unido, que exhibieron caídas en torno al 5 %—.

Y a esto se suma el incremento respecto al período prepandemia del número de pernoctaciones hoteleras en establecimientos de mayor categoría (cuatro y cinco estrellas), en línea con la mayor oferta de plazas de este tipo de establecimientos, lo que estaría ligado al aumento del gasto medio por turista. Según recoge la Encuesta de Ocupación Hotelera, el número de plazas en establecimientos de mayor categoría ha aumentado un 10% por encima del promedio 2016-2019, frente a la caída del resto de las categorías, que aún no habrían recuperado sus niveles prepandemia.

Cambios temporales

"Si bien aún es pronto para extraer conclusiones definitivas, el cambio climático podría estar originando desplazamientos de turistas hacia destinos con temperaturas más moderadas en verano; consecuencia de ello, se reduciría la concentración en las zonas de mayor afluencia en los meses estivales y aumentaría la ocupación de los destinos de playa durante los meses de otoño e invierno", afirma el supervisor bancario. También 'ayuda' la inestabilidad en Oriente Próximo por la guerra entre Gaza e Israel, que confiere a España cierta "ventaja frente a otros competidores del Mediterráneo oriental, como Egipto".

Pero todo eso es temporal. "De cara al futuro, todavía no está definido en qué medida podría continuar el proceso de diversificación —y de mejora de la calidad— de los flujos turísticos hacia nuestro país", agrega el artículo, que sitúa entre los vectores que podrían generar más visitantes el turismo de negocios --que en 2023 se encontraba casi un 3% de los niveles previos a la pandemia--, que "presenta un patrón menos estacional que el turismo de ocio y vacaciones"; y la "recuperación" de las llegadas de turistas como Japón, que "se caracteriza por presentar un gasto medio por turista elevado" o de economías europeas como Alemania.