El gobierno local mantiene su intención de no empezar a sancionar hasta junio a los conductores que circulen sin autorización por las calles San Antón y Parras o que no vayan al aparcamiento de obispo Galarza. La modificación de la ordenanza municipal que regula con cámaras el acceso de vehículos al centro histórico se publicó este viernes y entrará en vigor el 16 de mayo, aunque su principal incidencia, la limitación efectiva del acceso por las calles San Antón y Parras, no tendrá repercusión para los conductores hasta unas semanas después.

Por Parras y San Antón solo pueden circular los vehículos autorizados (residentes, dueños de cocheras, servicios públicos, reparto...) y los conductores que vayan al aparcamiento de obispo Galarza. Fuentes municipales confirmaron este viernes que el periodo de gracia se mantendrá hasta junio, que fue la fecha que se dio el pasado marzo, cuando la modificación de la ordenanza se aprobó definitivamente por el pleno de la corporación local.

También explicaron que ya se han colocado, de acuerdo con la empresa del aparcamiento de obispo Galarza, los equipos que permitirán identificar qué vehículos han entrado al aparcamiento. En la entrada a San Antón también se tendrá que colocar un panel que informe si en el aparcamiento de obispo Galarza hay plazas libres o está lleno.

Además, en las próximas semanas tendrá que empezar la obra para dotar de plataforma única (acera y calzada a la misma altura) al eje formado por las calles San Antón y Parras hasta el aparcamiento de obispo Galarza. Con esta medida de control, ambas calles dejarán de ser un camino alternativo para conectar el centro con la plaza de toros.